Domingo 26 de marzo de 2023, p. 19
Tel Aviv. El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, rompió ayer la postura del gobierno ultraconservador para demandar que se detenga el proceso parlamentario que alista la votación sobre la polémica reforma judicial, impulsada por el primer ministro Benjamin Netanyahu, mientras cientos de miles de personas salieron nuevamente a las calles del país a protestar en contra de la iniciativa, la cual consideran una amenaza para la división de poderes.
La reforma busca incrementar el poder de los legisladores respecto de los magistrados, que, según los detractores del proyecto, pone en peligro el carácter democrático del Estado.
Nunca he visto el nivel de odio y dolor que veo ahora. La división en la sociedad llega hasta el ejército y ello supone un peligro inmediato y tangible a la seguridad del Estado. No voy a ceder en esto. Necesitamos cambiar la judicatura, pero debe hacerse con diálogo. El proceso legislativo debe ser detenido
, afirmó Gallant en un discurso televisado.
Subrayó que “la seguridad de Israel es el objetivo de mi vida. Incluso ahora estoy dispuesto a asumir el riesgo y pagar el precio. Las amenazas que nos rodean son inmensas, cercanas y lejanas
, afirmó. En las semanas recientes, el ministro mantuvo contactos con mandos militares. Me preocupa lo que he escuchado
, indicó.
El líder de la oposición, Yair Lapid, elogió su valiente
discurso. El ministro de Defensa, Gallant, ha dado esta noche un paso valiente y vital por la seguridad de Israel. El golpe de Estado daña gravemente la seguridad nacional y su función y responsabilidad es detener este peligroso deterioro
, señaló.
Es el momento de la verdad. Pido al gobierno que lo pare todo, que no apruebe el cambio en la comisión de nombramiento de jueces y la ley Deri esta semana y venga y abra conversaciones en la sede de la presidencia
, añadió.
Sin embargo, el ministro de Seguridad Nacional, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, pidió a Netanyahu la destitución de Gallant.
Al menos 630 mil manifestantes salieron a protestar, según la estimación de la televisora Channel 12, en la que es la decimosegunda semana de movilizaciones contra la reforma judicial.