Madrid. El Nápoles se clasificó por primera vez en su historia a unos cuartos de final de la Champions; el Real Madrid, por su parte, avanzó sin ningún problema en un certamen que es de su dominio.

Napolitanos y madridistas volvieron a derrotar al Eintracht Frankfurt (3-0) y Liverpool (1-0), respectivamente, en los partidos de vuelta de los octavos.

En el sorteo de mañana, además del Real Madrid y Nápoles, estarán Inter, Milán, Bayern Múnich, Manchester City, Chelsea y Benfica.

En Nápoles se registraron enfrentamientos entre hinchas del Frankfurt y la policía horas antes del partido. Unos 600 ultras teutones viajaron a Italia pese a no disponer de entradas después del veto de las autoridades locales a los aficionados visitantes por temor a incidentes violentos, tal y como sucedió en Marsella en septiembre pasado. Los disturbios se concentraron en una plaza del centro histórico de la ciudad, pero la situación fue controlada.

El Napoli confirmó el buen momento del futbol italiano, al menos esta temporada, con tres equipos entre los ocho mejores del continente. No había tres clubes representantes del Calcio en los cuartos de final desde 2006.

Después de haber ganado 2-0 en la ida en Alemania, los napolitanos tenían el camino muy encarrilado y el choque de vuelta fue realmente un trámite, coronado con un doblete inicial de Victor Osimhen (45 y 53) y un tanto de penal marcado por Piotr Zielinski (64).

En este partido, el delantero mexicano Hirving Lozano ingresó de cambio al minuto 66.

En el Santiago Bernabéu, Karim Benzema concretó el único gol con el que los merengues seguirán defendiendo su corona continental, tras un partido al que llegaba con una ventaja de 5-2. El equipo blanco controló bien el encuentro, impidiendo a los Reds cualquier inten-to de remontada.

El portero brasileño Alisson Becker se convirtió además en el artífice de que su equipo mantuviese el empate en el marcador hasta que apareció Benzema.

Al final del encuentro sonó por el sonido del Bernabéu el You'll Never Walk Alone, himno del Liverpool como agradecimiento al equipo inglés por el homenaje ofrecido en Anfield a Amancio Amaro, presidente honorario del Madrid fallecido antes del partido de ida. Y el público dedicó una ovación a los jugadores e hinchas ingleses.