Lunes 13 de marzo de 2023, p. 20
El cierre del Silicon Valley Bank, una firma que se enfocaba a financiar principalmente a pequeñas empresas del sector tecnológico (conocidas como startups) no significa un riesgo para la estabilidad del sistema financiero estadunidense, según analistas. Sin embargo, la situación en torno a este intermediario, el decimosexto banco de Estados Unidos, refleja la complejidad de un entorno marcado por una baja en la demanda de crédito y mayores tasas de interés.
¿Qué sucedió con SVB?
Silicon Valley es una región en el sur de la bahía de San Francisco, California, donde radican varias de las firmas dominantes en el sector de la tecnología y la innovación.
Allí fue fundado hace 40 años el Silicon Valley Bank, entidad enfocada a otorgar financiamiento a las startups más prometedoras. Su actividad principal no estaba orientada a otorgar préstamos para el consumo, aunque sí financiaba hipotecas. El sistema financiero estadunidense está compuesto por más de 5 mil instituciones de crédito: bancos, cajas de ahorro y otras entidades.
El pasado viernes las autoridades reguladoras de Estados Unidos cerraron el SVB luego de que quedara escaso de liquidez. El banco reabrirá su puertas este lunes bajo control federal. Se trata de la mayor quiebra de su tipo desde 2008, cuando estalló la crisis financiera propiciada por la banca, aunque la firma californiana no tiene ni de lejos la relevancia sistémica que, en aquel entonces, representaba Lehman Brothers.
El SVB ocupaba el puesto 16 en importancia de los bancos estadunidenses, con poco más de 200 mil millones de dólares en activos. Su mejor momento lo atravesó entre 2020 y 2021, cuando las tasas de interés estaban prácticamente en cero por ciento y más firmas del sector financiero digitales realizaron depósitos, aunque no incrementó la cartera de crédito en la misma proporción.
El banco tomó la decisión de invertir en bonos gubernamentales su exceso de liquidez. Sin embargo, a raíz de la pandemia y la invasión a Ucrania, las autoridades monetarias del mundo han elevado las tasas de interés, lo que inhibe la demanda de crédito, para contener la inflación. El incremento en el precio del dinero redujo el valor de los bonos en que el SVB mantiene invertido el ahorro del público y ello resultó en un faltante de capital para el banco, lo que los obligó a anunciar que buscarían obtener capital, hecho que provocó desconfianza de sus clientes.