Domingo 5 de marzo de 2023, p. 8
Acusaciones como las formuladas esta semana de que los dos nuevos comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) fueron nombrados en el Senado según acuerdos cupulares y reparto de cuotas no son nuevas y se remontan a la propia constitución del organismo.
En 2014, cuando el Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI) fue sustituido por el INAI (que obtuvo este último nombre al año siguiente), organizaciones y especialistas señalaron que la designación de sus siete comisionados respondió a repartos partidistas, y al menos uno de los seleccionados, Rosendoevgueni Monterrey, no estaba entre los mejor calificados, algo similar a la designación de esta semana de Rafael Luna Alviso como comisionado, a quien se identifica como cercano al coordinador de Morena, Ricardo Monreal, y quien fue señalado como el peor calificado
en las evaluaciones realizadas como parte del proceso de elección.
De los 147 candidatos entrevistados en 2014, un comité de expertos entregó una lista de 25 con los perfiles más idóneos para convertirse en comisionados.
Los miembros del Senado responsables de aquellos nombramientos expresaron reiteradamente que su decisión no estaría influenciada por negociaciones políticas, pero luego de la votación, legisladores del PAN y el PRD manifestaron su descontento por el nombramiento de Monterrey, que fue incluido en la terna de aspirantes de último momento por el PRI, aunque no estaba en la lista de finalistas.
En su momento se señaló la presunta cercanía de Monterrey con el entonces presidente Enrique Peña Nieto, pues fue comisionado y presidente del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información del Estado de México cuando el ex mandatario gobernaba esa entidad.
El titular pide una reforma
En ese mismo proceso fue designada como comisionada Ximena Puente de la Mora, que renunció al cargo en 2018 para buscar una diputación plurinominal por el PRI, lo que le acarreó múltiples críticas.
El caso llevó a que el entonces presidente del INAI, Francisco Javier Acuña Llamas, pidiera al Senado una reforma constitucional para prohibir la postulación inmediata de integrantes del instituto a cargos de elección popular.
Un caso más reciente de nombramientos que provocaron cuestionamientos ocurrió el año pasado, cuando el pleno del INAI designó a los ex comisionados Óscar Guerra Ford y Monterrey como directivos del instituto.
Integrantes del consejo consultivo del INAI, ex miembros del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) y ex comisionados del instituto expresaron su preocupación ante la posibilidad de que se estuvieran repartiendo puestos
de manera poco transparente.