La Federación Mexicana de Futbol (FMF) no ofrece pistas de lo que depara el futuro. A unos días de que se cumpla el plazo establecido por el presidente Yon de Luisa, quien anunció en diciembre pasado una restructuración en la selección, el organismo sigue sin designar un entrenador que releve a Gerardo Martino rumbo al Mundial de 2026.

Los federativos estudian los perfiles de varios candidatos, incluidos Guillermo Almada, Miguel Herrera, Ignacio Ambriz y Jaime Lozano, pero por ahora no existe una comunicación abierta ni anticipada. Mientras se medita la toma de decisiones, ex directivos observan la necesidad de crear un comité que sirva de enlace entre la FMF y otras áreas deportivas del Tricolor.

Es un momento crucial para la Federación, considera Luis Miguel Salvador, mundialista en Estados Unidos 1994 y presidente del Monterrey por 15 años (2001-2016). “Tenemos el tiempo encima y el análisis debe ser frío. ¿Por qué no pensar en una comisión de selecciones nacionales? Un staff que sirva de apoyo para el director del área, que es Jaime Ordiales, y se debata la toma de decisiones, sin egos ni otros intereses. No se trata de llegar a mover tapetes. De alguna manera eso puede arropar el siguiente proceso. Los equipos pueden proponer el camino, pero al final la decisión corresponde a otros niveles”.

La eliminación en la fase de grupos en Qatar, agrega el ex delantero del Atlante, es un golpe que debe cimbrar la estructura del futbol mexicano, sin importar que su lugar esté seguro en el Mundial de 2026 como país sede. Por eso es importante saber qué es lo que se busca en el siguiente entrenador. Elegir a alguien que no conozca el futbol mexicano ni lo que existe alrededor de la selección es un riesgo, porque en este proceso no hay eliminatoria y quedan apenas tres años y medio. Ese debe ser el punto de análisis de la Federación.

El Tri volverá a la actividad con un par de partidos en la Liga de Naciones de Concacaf, midiéndose contra Jamaica y Surinam, a finales de marzo. A la espera de ello, quedan varios temas por definir en la estructura del futbol local: el probable regreso del ascenso y descenso, la cantidad de jugadores extranjeros en los equipos, además de nuevos responsables en selecciones menores. Hasta ahora ni De Luisa ni los federativos han emitido declaraciones al respecto.

Cada decisión que se tome tiene que pasar primero por otros despachos, reconoce Salvador, quien hasta hace unos meses era considerado para encabezar la dirección de selecciones nacionales.

Lo mínimo que tienes que hacer en ese puesto es entrevistarte personalmente con cada uno de los posibles entrenadores, platicar a fondo de modos y formas. Sentarte y definir una propuesta futbolística para saber con quién se identifica mejor el proyecto. Aunque mi nombre apareció como posibilidad, nadie en la FMF hizo contacto conmigo, yo siempre estaré abierto para ayudar, sostuvo.

Sin un rumbo definido, se espera que De Luisa reaparezca en público la siguiente semana, cuando venza el plazo que él mismo fijó para presentar el análisis del último ci-clo mundialista.