Bajo el amparo de esa regulación, EU negó el derecho de solicitar asilo o audiencia en 2.5 millones de ocasiones
Miércoles 21 de diciembre de 2022, p. 5
El Paso, Texas. El gobierno del presidente estadunidense Joe Biden pidió ayer a la Suprema Corte de Justicia que ponga fin a las restricciones al asilo previstas en el Título 42, que caducan este miércoles, pero solicitó una prórroga por lo menos para hasta después de Navidad.
El máximo tribunal debatía el tema avanzada la noche del martes y podía tomar una decisión en cualquier momento.
La administración de Biden alegó en documentos enviados a la Corte que los gobiernos estatales republicanos no tienen por qué interferir en la decisión de poner fin a la normativa, impuesta en marzo de 2020 durante el gobierno del presidente Donald Trump.
El propósito del Título 42 era impedir que ingresaran migrantes a territorio estadunidense, con el argumento de frenar la pandemia. La disposición debía finalizar este 21 de diciembre.
Estados Unidos negó el derecho de solicitar asilo o audiencia en 2.5 millones de ocasiones desde marzo de 2020 bajo el amparo de esa regulación.
La Casa Blanca reconoció en los documentos entregados a la Corte que el fin del Título 42 probablemente provocaría trastornos y un aumento temporal de cruces fronterizos ilegales
, pero pidió al tribunal que rechace los intentos de los 19 gobernadores republicanos de mantener indefinidamente la medida.
El gobierno no pretende en absoluto minimizar la gravedad de ese problema. Pero la solución no puede ser prorrogar indefinidamente una medida de salud pública que, todos reconocen, ha superado su justificación sanitaria
, escribió el gobierno.
La Casa Blanca afirmó que se están enviando recursos a la frontera entre Estados Unidos y México para lidiar con cualquier trastorno temporal que se produzca.
El gobierno federal también pidió que, si la Suprema Corte rechaza los intentos de los estados para mantener el Título 42 indefinidamente, otorgue un tiempo para que la autoridad federal se prepare.
Pidió específicamente que si la Corte actúa antes del viernes, deje la suspensión temporal en vigor sólo hasta el final del día 27 de diciembre.
Si el tribunal rechaza la solicitud el viernes o después, el gobierno quiere que se mantengan las restricciones hasta el segundo día hábil después de que el máximo tribunal emita una orden. Cualquiera de los dos plazos, en caso de que se conceda, significaría que el Título 42 estaría en vigor al menos hasta después de Navidad.
En noviembre pasado, un tribunal inferior ordenó al gobierno de Biden suspender el Título 42 y el mandatario solicitó que se le diera de plazo hasta el 21 de diciembre para cumplir el fallo; pero antier el presidente de la Corte, John Roberts, emitió una orden temporal para mantener en vigor hasta ayer a las cinco de la tarde las restricciones a la migración implementadas durante la pandemia ante la petición de los 19 gobernadores.
Abogados de la Unión Estadunidense para las Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en inglés) instaron también a la Corte rechazar el pedido de los gobiernos estatales, informó CNN.
Lee Gelernt, abogado de la asociación, señaló que la norma sanitaria nunca se pensó como algo permanente y que no se pretende que todo migrante obtenga el estatus de asilado o residente en Estados Unidos, pero que el Título 42 despoja a todas las personas de su legítimo derecho a solicitar asilo o solicitar una audiencia.
Por su parte, Mark Brnovich, el procurador general de Arizona, estado que encabezó el pedido de los 19 gobiernos ante la Suprema Corte, afirmó que desechar en este momento el Título 42 equivale a poner en peligro, inconsciente e innecesariamente, a más estadunidenses y más migrantes, al exacerbar la catástrofe que ocurre en la frontera, donde se calcula que los cruces ilegales aumentarán de 7 mil a 18 mil al día
.
Añadió que los estados del sur del país sufrirán masivos e irreparables daños a consecuencia de la migración ilegal
.
En El Paso, Texas, el alcalde demócrata Oscar Leeser advirtió que los albergues del otro lado de la frontera, en Ciudad Juárez, México, se encuentran a su máxima capacidad con unos 20 mil migrantes dispuestos a cruzar a Estados Unidos.