El aumento de 150 millones de pesos de presupuesto que se aprobó el Congreso de la Ciudad de México fue una reorientación de recursos y no deuda, aclaró la Secretaría de Administración y Finanzas del gobierno capitalino.

De hecho, señaló que la capital del país fue reconocida como una de las entidades que más contribuyó a la baja de la deuda subnacional, con una disminución de 5 mil 265.2 millones de pesos al tercer trimestre de este año, según un estudio realizado por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados. Recordó que la deuda de la capital representa alrededor de 2.5 por ciento del producto interno bruto de la ciudad, uno de los más bajos del país.

Precisó que para no endeudar a la capital se determinó utilizar los recursos fiscales para inversión, de tal forma que cada año se ha disminuido el techo de deuda de 4 mil 500 millones a 3 mil millones de pesos en lo que va de esta administración, lo que en términos reales significa un desendeudamiento.

Agregó que la mitad de la deuda de la ciudad es a tasa fija y el resto a tasa variable, y debido al incremento en las tasas de interés internacionales, este año se pagaron cerca de 2 mil millones de pesos más por intereses respecto al año anterior.

La idea, agregó, es dejar a la siguiente administración finanzas sanas, menos deuda.

Amplían recursos al IECM

En cuanto al Presupuesto de Egresos aprobado para la ciudad, luego de un año de disputas legales y de reducir su estructura al mínimo, el Gobierno de la Ciudad de México entregó una ampliación presupuestal de 39 millones de pesos al Instituto Electoral local (IECM), que se destinarán al pago de prerrogativas a partidos, aguinaldos a personal y restitución de dinero del fondo de contingencia laboral.

A decir de la presidenta del organismo, Patricia Avendaño, el IECM demostró su convicción de crear una institución eficiente con una política de gasto apegada a la austeridad, por lo que el gobierno accedió a otorgar la ampliación; esto, a un año de diversas disputas legales y de haber implementado una reforma que redujo áreas administrativas.