▲ Momento en que Pedro Castillo, el depuesto presidente de Perú, es escoltado a una estación de policía en Lima. La crisis terminal de su mandato estalló luego de emitir un sorpresivo mensaje televisivo al país, al mediodía de ayer, para anunciar el cierre del Congreso. También había instaurado un gobierno de emergencia nacional y decretó un toque de queda. En sesión parlamentaria se iba a debatir y votar una moción para destituirlo por incapacidad moral debido a denuncias de corrupción. Foto Ap