Sábado 26 de noviembre de 2022, p. 2
Doha. Arabia Saudita, que el martes dio la sorpresa al doblegar a Argentina en su presentación, quiere prolongar su racha contra la Polonia de Robert Lewandowski, quien, después de fallar un penal contra México, sigue deseoso de romper su maldición goleadora en la Copa del Mundo.
Los tres puntos logrados ante el teórico favorito de la llave C puso a los árabes un paso más cerca de octavos de final, ronda que sólo alcanzó una vez (Estados Unidos 1994, cayó 3-1 ante Suecia) en sus seis participaciones en la justa.
Después de esta victoria, está prohibido no clasificarse
, aseguró eufórico Saleh Al-Shehri, autor del primer gol contra la Albiceleste.
Un nuevo triunfo hoy contra los europeos, en el estadio Education City, prácticamente aseguraría el boleto a la siguiente fase de los Halcones Verdes, que no podrán contar con el defensa Al Shahrani, cuyo estado de salud se reporta fuera de peligro tras un choque con el portero Al Owais, que derivó en una cirugía.
Nuestro líder y capitán, será difícil que juegue (hoy). Es una gran pérdida, pero le ocurrió a algunos jugadores antes del Mundial o incluso en plena competencia, como a Neymar. Esto forma parte del futbol
, dijo el estratega Hervé Renard.
El resultado no ha cambiado nada. Seguimos siendo el equipo más bajo del grupo en términos de clasificación y experiencia
, agregó el francés.
Equipo herido
Para lograr su objetivo, los árabes tendrán que superar a una Polonia que llega herida lue-go de no pasar del empate contra el Tricolor, en un encuentro marcado por el penal fallado por Lewandowski frente a Guillermo Ochoa.
El delantero del Barça, Bota de Oro en 2022, aún no sabe lo que es marcar en un Mundial después de que en su primera cita, hace cuatro años en Rusia, se fue en blanco.
Robert es nuestro atacante número uno. Será él quien decida si quiere tirarlo o lo deja a otro. Se siente preparado para marcar
, aclaró el técnico Czeslaw Michniewicz en conferencia sobre la posibilidad de que su equipo tenga otro penal en su favor.
Para el choque contra los asiáticos, el seleccionador polaco dispone de sus 26 jugadores y augura una táctica idéntica a la que permitió a su rival imponerse a Argentina.