ntre enero-septiembre de este año los ingresos presupuestarios del sector público federal ascendieron a 4 billones 886 mil 435 millones de pesos, 258 mil millones (5.6 por ciento) sobre lo programado. Esta mayor captación se debió a que los ingresos petroleros fueron 212 mil millones superiores a lo presupuestado y los no petroleros 46 mil millones (gráfico 1). Buenos resultados, pero insertos en una estructura fiscal deficiente.
Los ingresos no petroleros no fueron más altos por la caída de la captación del IEPS (-313 mil millones abajo de lo programado) que el gobierno dejó de cobrar en subsidio a los combustibles para paliar la inflación, ya que el resto de los impuestos superan lo programado: el ISR 11 por ciento, el IVA 3.0, el impuesto a las importaciones 29.5 y otros impuestos 25.8. Así mismo, los ingresos no tributarios (derechos, productos, aprovechamientos) ingresaron recursos 52.4 por ciento mayores a lo presupuestado.
De los organismos de control presupuestal directo, el IMSS superó 8.1 por ciento los ingresos esperados y el Issste -3.8 abajo. La empresa productiva CFE ingresó 2.1 más.
No obstante este buen desempeño global de los ingresos, el gasto ejercido en el periodo ascendió a 5 billones 258 mil 30 millones, arrojando un déficit presupuestario de -372 mil millones (programado en -549 mil m).
Este deficiente y otras inversiones mayores requirieron recursos adicionales vía deuda, la cual se elevó en septiembre en términos brutos a 14 billones 261 mil millones de pesos, 771 mil millones más que en diciembre 2021 (gráfico 2). En este periodo la deuda externa disminuyó marginalmente de 222 mil millones de dólares a 217 mil millones y sólo creció la deuda interna en 922 mil millones de pesos (902 mil millones del gobierno federal, 13 mil millones de Pemex y CFE, y 7 mil millones de la banca de desarrollo). Como porcentaje del PIB, la deuda total es el 49.2.
El gasto ejercido en el periodo (5.258 b) fue 1.6 por ciento mayor a lo programado. De este total, el gasto de los ramos autónomos fue -15.4 inferior, el de los ramos administrativos 4.8% mayor, y el de los ramos generales -0.5 inferior (gráfico 3). A pesar del alza en las tasas de interés, el costo financiero de la deuda fue -2.1 por ciento inferior.
Por dependencias administrativas, el mayor gasto ejercido en el periodo correspondió a: Educación, 245 mil millones; Bienestar, 244 mil; Energía, 110 mil; Salud, 106 mil, y Turismo (Tren Maya) 91 mil millones.
La inversión física realizada entre enero y septiembre asciende a 614 mil millones de pesos, 15.3 por ciento más que en 2021. De este total, la inversión de gobierno (básicamente seguridad nacional) aumentó 7.3, la de desarrollo social 3.3, y la de desarrollo económico 23.3 por ciento (gráfico 4).
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