En el fraccionamiento Terranova, ubicado en el municipio de Juárez, Nuevo León, y donde hay propiedades con albercas, se localizaron tomas clandestinas de agua potable, denunció el director de Agua y Drenaje de Monterrey (SADM), Juan Ignacio Barragán Villarreal.

Estimó que hasta 50 por ciento del líquido consumido en dicha unidad habitacional no está facturado, por lo que anunció inspecciones y clausuras.

Sostuvo que la zona se desarrolló inicialmente como un sector de quintas que tomaban agua de pozos y en los últimos años se urbanizó.

Gran parte de esta colonia no está integrada a la red y, sin embargo, no solamente tienen agua, sino incluso albercas y propiedades muy importantes con grandes jardines que están utilizando agua de manera ilegal, expuso.

Agregó que están haciendo un análisis de los inmuebles que no pagan tarifa. Estamos hablando de entre 40 y 50 por ciento de agua no facturada.

Juan Ignacio Barragán añadió que se han presentado alrededor de 30 denuncias por uso ilegal de agua, además de sanciones administrativas impuestas no sólo por la paraestatal que él dirige, sino también por las secretarías de Medio Ambiente y del Trabajo.

En ese contexto, en el Congreso del estado de México, el diputado local de Morena Daniel Sibaja presentó una iniciativa de ley para que en las zonas donde hay mayor desabasto de agua potable, como el Valle de México, se puedan instalar sistemas de captación de agua pluvial con el apoyo de los gobiernos estatal y municipales.

Explicó que los sistemas de captación estarían en escuelas públicas, pues en el retorno a clases se observó que el desabasto fue uno de los principales problemas, y en zonas con mayor estrés hídrico.

Durante la reunión de la Comisión de Recursos Hidráulicos, el legislador recordó que en la Ciudad de México, específicamente en Iztapalapa, ya se instalan sistemas de captación, porque con lo que se puede acumular puede vivir una familia 60 por ciento del año.

Con esta propuesta podríamos dar respuesta ante la escasez que padecen muchos municipios del valle de México y se ha demostrado que puede tener viabilidad política, jurídica y financiera; no creo que ningún partido esté en contra.

Señaló que el costo estimado de un sistema de captación de agua es de 12 mil a 13 mil pesos; el gobierno podría subsidiar la mitad y el resto correría por cuenta de los ciudadanos, a fin de generar incentivos para el cuidado del agua.

El diputado morenista consideró que esta propuesta tendría que sumarse el gobierno estatal para emprender un programa integral, como ya sucede en otras entidades.