Madrid. El partido Unidas Podemos, que integra la coalición de gobierno español, criticó que el rey Felipe VI no se levantara ante la espada de Simón Bolívar durante la investidura el domingo del nuevo presidente colombiano, Gustavo Petro, y pidió que Madrid se disculpe; mientras, el Partido Popular y Vox respaldaron la acción del monarca y afirmaron que no ven ninguna polémica.

La espada de Bolívar representa la soberanía de Latinoamérica. El rey Felipe VI ha sido el único jefe de Estado que ha permanecido sentado a su paso en la toma de posesión del nuevo presidente de Colombia. Una falta de respeto grave, tuiteó Podemos.

En un video que circula en redes sociales se puede ver cómo el rey se mantuvo sentado, mientras otros dignatarios se levantaron y aplaudían, cuando un grupo de militares llevaba la espada del héroe independentista latinoamericano Simón Bolívar en una urna de vidrio hasta la plaza que lleva su nombre en Bogotá, en el acto de investidura de Petro.

Durante el acto, Felipe VI fue abucheado por el público cuando fue mencionado mientras Petro saludaba a los diferentes representantes de Estado.

Es inexplicable lo ocurrido y merece una disculpa, comentó Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos, socio minoritario del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en el gobierno de Pedro Sánchez.

El ministro de Cultura y Deporte, el socialista Miquel Iceta, minimizó el hecho al calificarlo de ser una polémica veraniega, que sólo busca marcar “una especie de posición política, y consideró como disparatado que España deba ofrecer disculpas por este gesto no protocolario.

Pablo Echenique, vocero de Unidas Podemos en el Congreso, condenó la falta de respeto del monarca al ser el único que permanece sentado ante la espada de Bolívar, que representa la independencia y la soberanía de tantos pueblos latinoamericanos que ya no son vasallos.

Diputados del ultradechista Vox, como Juan Luis Steegmann, mostraron su respaldo al rey y algunos aseguraron que la espada aún estaría todavía manchada de sangre de españoles.