Viernes 5 de agosto de 2022, p. 6
La escultora franco-estadunidense Louise Bourgeois (1911-2010), cuya obra se expuso en el Museo del Palacio de Bellas Artes entre 2013 y 2014, ahora es objeto de una retrospectiva en el Gropius Bau, espacio expositivo en Berlín.
En Louise Bourgeois: Petite Maman se exhibió una araña monumental de bronce y acero en la explanada del recinto mexicano. The Woven Child (El niño tejido), por su parte, es la primera muestra en revisar la conexión de Bourgeois con los textiles, así como los recuerdos que conjuran, por medio de 89 esculturas, instalaciones, dibujos, collages, libros y estampados. Curiosamente, la artista empezó a trabajar con textiles después de llegar a los 80 años de edad.
La decisión de crear obras de arte con base en su ropa y los textiles de su casa fue una manera de transformar, así como de preservar el pasado. Bourgeois incorporó estos objetos, que resguardaban memorias asociadas con lugares y personas específicas, en instalaciones escultóricas.
La figura de la araña no falta en sus exposiciones. Al respecto, Bourgeois ha dicho: Vengo de una familia de reparadores. La araña lo es. Si choca con su telaraña, no se enoja. Teje y la repara
. La artista entendía a la araña como un ser protector y depredador a la vez, y la asociaba con su madre, tejedora y restauradora de tapices.
Desde mediados de los años 90, la artista creó un amplio rango de esculturas, de gran inventiva y carga sicológica, con base en textiles domésticos, muchos de su casa e historia personal. Dejar atrás los materiales escultóricos tradicionales representó un regreso a sus raíces. La conexión de Bourgeois con las telas comenzó en su niñez, al ayudar en el taller de restauración de tapicería de su familia.
“Para ella, los textiles eran una manera de recrear los procesos de remendar en lo sicológico, lo social y lo material. Al igual que nuestro interés por la práctica de los oficios, como la costura y el tejido, la reparación está en la base de la programación del Gropius Bau. The Woven Child muestra cómo lo relativo con la reparación genera creatividad”, declaró Stephanie Rosenthal, directora del recinto.
La exposición comprende instalaciones como Poles (Postes) y Cells (Células), en las que cuelgan composiciones de vestidos viejos, enaguas y otras prendas que remiten a su historia personal. Spider (Araña, 1997), y la pieza relacionada, Lady in Waiting (Dama en espera, 2003), incorporan fragmentos de tapicería antigua. The Woven Child permanecerá hasta el 23 de octubre en el Gropius Bau, Berlín, Alemania.