En una clara referencia a las investigaciones de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México contra Luis Vizcaíno Carmona, ex director Jurídico y de Gobierno en la entonces delegación Benito Juárez, por una presunta red de corrupción por la que también se indaga a otros ex funcionarios de la demarcación, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que esos son los que también tienen que ser castigados y se tiene que acabar con la impunidad.

Entre los distintos temas que abordó en su conferencia de prensa diaria, el mandatario recriminó a quienes tienen un cargo público y lo usan para robar, y ni se despeinan ni pierden su respetabilidad, como el caso de este abogado de la delegación Benito Juárez, que daba permisos para hacer edificios y por cada edificio pedía un departamento, o eso es lo que está arrojando la investigación.

Falta avanzar para acabar con la impunidad

El titular del Ejecutivo federal lamentó que se encontraba a todo dar, colmado de atenciones, de privilegios, hasta aplaudido por la gente.

Recalcó que un delincuente no sólo es el que se presenta como integrante de las bandas del crimen organizado, sino también los de cuello blanco, tema en el que, apuntó, aún falta avanzar para acabar con la impunidad, y reiteró que sea quien sea que cometa un delito, debe ser castigado.