Montevideo. El gobierno de presidente de Chile, Gabriel Boric, amplió ayer la querella contra el líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, quien llamó a organizar la resistencia armada en mayo, cuando el Ejecutivo se disponía a reactivar el estado de excepción en el sur del país.

Héctor Llaitul ha tenido muchos dichos, y los de ahora son particularmente graves porque se atribuye la autoría de delitos. Por lo tanto, nos pareció que era pertinente ampliar la querella que ya había sido presentada porque hay, justamente, nuevos antecedentes, explicó el mandatario en una entrevista en la televisión.

El gobernante hizo hincapié en que la decisión se basó en los nuevos antecedentes, y enfatizó que el gobierno tiene la obligación de evaluar siempre las decisiones y es él quien debe tomar la última. Boric detalló, además, que la vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, señaló de manera muy clara que la fiscalía tiene todas las facultades para investigar.

Las declaraciones del mandatario se dan en el marco del anuncio que realizó antier la ministra del Interior, Izkia Siches, sobre la ampliación de la querella contra Llaitul.

Hemos analizado a profundidad los dichos, que a nuestro juicio son constitutivos de delitos, dijo Siches. Desde 2019 ya existen distintas indagatorias por parte del Estado que permiten al Ministerio Público actuar frente a la adjudicación de hechos que atentan contra toda la ciudadanía, señaló.

De esta manera, se reactivará la investigación contra Llaitul, quien en mayo pasado llamó a generar resistencia armada ante las medidas que proponía el gobierno para el sur del país. El estado intermedio no es otra cosa que un nuevo estado de excepción. Es decir: los milicos esbirros nuevamente desplegados por el Wallmapu (territorio mapuche) custodiando los intereses del gran capital, dijo.