Martes 26 de julio de 2022, p. 2
Londres. El reciente aumento de los casos de hepatitis aguda entre los niños está probablemente relacionado con un virus infantil común, sugieren dos estudios independientes de investigadores británicos.
Varios países empezaron a notificar casos de inflamación hepática grave, o hepatitis de origen desconocido, en niños en abril.
Ahora se han detectado al menos mil 10 casos en 35 países, según la Organización Mundial de la Salud. En total, 46 niños han necesitado un trasplante de hígado y 22 han muerto.
Al principio, los expertos sugirieron que el adenovirus –un virus que causa el resfriado común– podría estar relacionado con el brote.
Adeno-asociado 2
Estudios dirigidos por la Universidad de Glasgow y el Hospital Great Ormond Street de Londres han sugerido que otro virus común, el adeno-asociado 2 (AAV2), estaba presente en la mayoría de los casos, y es probable que esté relacionado con las raras, aunque graves, complicaciones hepáticas.
Los investigadores afirmaron que no estaba claro si el AAV2 encontrado en las muestras de los niños era un indicador de una infección anterior por adenovirus o una causa en sí misma. Hasta ahora no se sabía que ocasionara enfermedades y no puede reproducirse sin un ayudante
, como el adenovirus.
Los autores afirmaron que la coinfección con AAV2 y adenovirus, o con menor frecuencia con el virus del herpes HHV6, era una explicación plausible para los casos de hepatitis de origen desconocido entre los niños, y que era necesario realizar más investigaciones.
El AAV2 estaba presente en 96 por ciento de los casos de ambos estudios, que en conjunto incluían 37 en Reino Unido, así como grupos de control.
Los investigadores escoceses también encontraron diferencias en el gen del antígeno leucocitario humano en los niños que enfermaron de forma grave.
Aunque las razones del momento en que se produjo el brote siguen sin estar claras, ambos equipos sugirieron que un pico de casos de adenovirus tras el levantamiento de los confinamientos por coronavirus podría ser un factor.
Ambos estudios también concluyeron que era muy poco probable que el covid-19 estuviera vinculado, ya que el aumento de casos no siguió a los picos de coronavirus, no se encontró evidencia de Sars-CoV-2 en el hígado, y una proporción similar de niños tenía tantos anticuerpos como la población en general.