l 16 de mayo de 2022 el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, comunicó un –bienvenido pero raquítico– incremento salarial al magisterio que, en sus palabras, implementa una política de bienestar donde los trabajadores en activo verán un aumento de su salario base de cotización y, por ende, van a tener un aumento en sus contribuciones para el retiro
(conferencia matutina). ¿Es esto cierto?
El anuncio propone la siguiente cadena causal: en el inmediato corto plazo mejora salarios magisteriales con percepciones mensuales brutas menores a 20 mil pesos lo que, consecuentemente, mejora el salario cotizable promedio al Issste. Porque, además de la raquítica magnitud del incremento, integra más prestaciones: aguinaldo y prima vacacional. Por tanto, habrá mayor monto cotizable y, por ende, mayor ahorro para el retiro.
Pero esta mejora
, sin alterar el sistema de cuentas individuales, ocurre en el marco de pensiones en el sótano que autofinancia el magisterio en la Afore-Pensionissste. Es decir, no hay ninguna mejora pensionaria estructural. Como el patrón, en este caso el Estado, paga más, el maestro cotiza más. La mejora
en el salario es simultáneamente una mejora
en la cotización. Pero no mueve la aguja pensionaria. Para ello se requeriría un ajuste estructural al sistema de pensiones del Apartado B.
Por la regresiva reforma calderonista al Issste de 2007, y el surgimiento de las cuentas individuales para todos los trabajadores al servicio del Estado, en el Apartado B del artículo 123 constitucional, la baja pensión autofinanciada del magisterio afiliado forzosamente a la Afore-Pensionissste tiene como límite el nivel de pensión mínima garantizada (PMG) al cargo del gobierno federal.
Así que no en el inmediato corto plazo, sino en el corto plazo, el magisterio recibirá un poco más de ahorro para su retiro en las cuentas individuales por ese aumento al salario cotizable. Pero, en el largo plazo, el anuncio de Ramírez de la O se traducirá en que, como los maestros cotizan un poco más, el gobierno federal desembolsará menos recursos para complementar esa PMG debido a la bajas pensiones que paga la Afore-Pensionissste.
Se trata, entonces, de un incremento de poca magnitud y con muy bajo impacto sobre el salario base de cotizacion y, por tanto, sobre el nivel pensionario final. El cuadro resultante muestra que para todos los grupos de maestros beneficiados por el incremento y ubicados en la Afore-Pensionissste, la mejora
no los rescata de la órbita de esa PMG. Y, para los amparados por el artículo décimo transitorio de la misma ley, habría apenas una micromejora para un universo de 49 mil maestros respecto a sus expectativas de cuantía de la pensión.
Dada la lógica descrita por el SAR y el sistema de cuentas individuales (tanto en el Apartado A como en el B), todo lo que le ponga extra el trabajador para seguir autofinanciando su pensión en la Afore-Pensionissste, que como tales Afores seguirán pagando pensiones en el sótano y requerirán el subsidio del Estado para mejorarlas con la PMG, el incremento anunciado por Ramírez de la O, mientras no se reforme el sistema de cuentas individuales del Apartado B vía la Afore-Pensionissste, tendrá también el efecto simultáneo de acuerdo al cual, mientras más ponga el trabajador para autofinanciar su pensión, menor cantidad deberá poner el Estado por concepto de esa PMG.
Entonces: el bienvenido, aunque raquítico incremento, puede resumirse en: te pagó más, cotizas más, pero como Estado gastaré menos
. Todo ello mientras el presidente López Obrador no termine la tarea
a que se comprometió el 15 de mayo 2022 celebrando a los maestros. En esa ocasión sostuvo que nos queda de tarea que las pensiones, en vez de que sean individuales, sean como antes: que vayan a un fondo y que el Estado responda de ellas. Que no se pongan en riesgo bajo ninguna circunstancia. Eso nos queda de tarea. Y también lo de las UMA: que vayan incrementándose año con año para que no se queden rezagados
.
Es decir: hasta que él mismo opte por aplicar una reforma pensionaria de fondo para todos los trabajadores del Apartado B (donde es el patrón como titular del Poder Ejecutivo) y que finalmente rompa con la lógica neoliberal que preservó con su tibio ajuste a las pensiones del Apartado A en su decreto del 16 de diciembre de 2020, donde se ahorra para las Afore y no para el retiro.
Exactamente el mismo fenómeno descrito se repetirá con la pensión que le corresponderá al presidente López Obrador, reafiliado a Pensionissste el 21 de diciembre de 2018.
*Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco