La bancada de Morena en el Senado, junto con sus aliados del Verde y del PT, cerraron filas con su candidato a la gubernatura de Tamaulipas, Américo Villarreal, quien denunció ayer en el pleno una operación de Estado y una campaña de persecución política en su contra y de sus familiares.

El político acusa al actual mandatario estatal, el panista Francisco García Cabeza de Vaca, de operar una guerra sucia en su contra ante las tendencias electorales que estiman el triunfo de la coalición Juntos Haremos Historia, el 5 de junio.

En la Junta de Coordinación Política, el candidato Villarreal recibió el respaldo del coordinador Ricardo Monreal, de la presidenta de dicho órgano legislativo, Olga Sánchez Cordero; del presidente nacional de Morena, Mario Delgado, y de otros 30 senadores morenistas y aliados, así como diputados federales y locales, quienes le aseguraron que no lo dejarán sólo en el proceso electoral y que no permitirán la intromisión de los poderes de esa entidad.

Villarreal denunció, ante parlamentarios y el presidente de su partido, los excesos ilegales que han protagonizado el gobernador García Cabeza de Vaca y su candidato El Truco Verástegui, cómplices de un intento de elección de Estado, pues en la medida en que se consolida la candidatura de la coalición Juntos Haremos Historia, han intoxicado el ambiente político.

Comentó que como no pudieron conmigo, porque no tienen cómo imputarme, decidieron entonces ir contra mi familia, en una encarnizada persecución con injurias, maltrato a su reputación y daño moral.

Monreal hizo un llamado a la civilidad y convocó a una tregua para detener la guerra sucia, así como el clima de hostilidad y zozobra que se vive en Tamaulipas y en las otras seis entidades en las que se renovarán los poderes ejecutivos locales. Permitamos que la ciudadanía vote en libertad, sin miedo, sin amenazas, sin presión ilegal. Es el momento de la democracia, de la madurez política, de la transición pacífica y ordenada, subrayó.

Sánchez Cordero, al tomar la palabra, aseguró que de ninguna manera se pueden aceptar injerencias e intromisiones que vulneren, o pretendan hacerlo, la voluntad del pueblo. No vamos a permitir que los gobernadores salientes operen y manipulen a su favor, con trampas y amenazas, la voluntad del pueblo en la entidad ni ninguno de los estados que tienen elecciones.

Refirió que, cuando estuvo a cargo de la Secretaría de Gobernación, jamás hubo una queja sobre alguna intromisión del gobierno federal en los comicios de los estados, pues fuimos respetuosos a cabalidad de la voluntad de la sociedad.

El presidente de Morena, Mario Delgado, destacó que vemos un gobierno local desesperado.

Se trata, precisó, de un régimen desesperado que impulsó una guerra sucia con una serie de montajes, noticias falsas y burdas; además de que iniciaron una campaña de miedo y terror para amedrentar al pueblo de Tamaulipas.