Miércoles 2 de marzo de 2022, p. 19
Los mercados accionarios y cambiarios sufrieron un nuevo castigo ante el agravamiento de la guerra en Ucrania y ante el poco efecto del diálogo diplomático.
El dólar y la deuda soberana de Estados Unidos, Alemania y Japón, entre las principales, así como el oro, instrumentos refugio por excelencia, le quitaron los reflectores a los activos financieros de mayor riesgo (efecto conocido como el fly to quality, vuelo a instrumentos de bajo riesgo).
El dólar, medido a través de su índice DXY –el cual mide el comportamiento de la divisa estadounidense frente a sus principales cruces internacionales–, ganó 0.72 por ciento, a 97.388 puntos. El oro, por su parte, ganó 2.03 por ciento, para llegar a mil 947.81 dólares por onza troy.
Por su parte, en el mercado de deuda las compras se han acelerado en busca de refugio y los rendimientos se desplomaron: El bono alemán volvió a terreno negativo, cerca otra vez del 0.10 por ciento, mientras el del bono estadounidense a 10 años que hace unos días llegó a superar 2 por ciento, cotizó en 1.7 por ciento debido a la amplia demanda de inversionistas.
Ante este escenario de elevada volatilidad, el peso mexicano se depreció 0.58 por ciento frente a la divisa estadunidense, equivalente a 11.85 centavos, para cerrar en 20.6397 pesos por dólar spot.
De acuerdo con el Banco de México, la paridad peso-dólar operó entre un máximo de 20.6610 unidades y un mínimo de 20.4740 unidades.
Los temores sobre los efectos económicos del conflicto entre Rusia y Ucrania volvieron a golpear ayer a los mercados.
El avance de las tropas rusas hacia Kiev arrastró a Wall Street, que cerró con una caída superior a 1.5 por ciento. El Dow Jones fue el más castigado al bajar 1.76 por ciento; le siguió el Nasdaq, con un retroceso de 1.59 por ciento y el S&P 500 disminuyó 1.55 por ciento.
En la misma ruta de los mercados estadunidenses, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) inició marzo con una caída de 0.43 por ciento, en 53 mil 168.82 puntos.
Por su parte, las bolsas europeas recibieron el mayor impacto. El Stoxx 600 disminuyó 2.37 por ciento; y el índice FTSE MIB italiano se contrajo 4.14 por ciento; el DAX alemán, retrocedió 3.85 por ciento, y el FTSE de Londres cayó 1.72 por ciento.