Mujeres que se aman en busca de un hijo. Madres con hijos, desesperadas por asegurarles la felicidad. Hijos desorientados, que tratan frenéticamente de encontrar su lugar. Historias de seres buscándose la vida, y entre todo esto, el amor, que lo atraviesa todo, que permite lo bueno y lo malo...

Así definen la historia de El viento en un violín, comedia negra magistralmente escrita que nos acerca a unos personajes que viven en el límite de la cordura y desean desesperados acercarse el uno al otro. Es una obra que aborda la necesidad de encontrar nuevas formas de vincularnos para poder afrontar un poco más serenamente la locura que nos rodea, afirmó Cristian Magaloni, su director.

Escrita por el argentino Claudio Tolcachir, se presentará por primera vez en México bajo la producción de Ana Kupfer y Eloy Hernández.

De acuerdo con el también dramaturgo Magaloni, la pertinencia de este texto radica en la manera en que muestra la responsabilidad sobre la familia, que es el corazón de la obra y un tema muy importante en la época en la que vivimos. El concepto de familia se expande cada vez más, los roles cambian, lo que consideramos una familia evoluciona y para él, como artista, es necesario reflexionar sobre el tema.

Para dar vida a esta historia, la puesta cuenta con un grupo de apasionadas actrices y actores como Mercedes Hernández, Mahalat Sánchez, Assira Abbate, Roberto Beck, Ari Sacristán y Daniel Mandoki.

La adaptación corrió a cargo de Jimena Emme Vázquez, la escenografía e iluminación son de Jesús Hernández, el vestuario de Giselle Sandiel y la musicalización está a cargo de Daniela Mandoki.

El viento en un violín hará temporada los miércoles del 2 de marzo al 18 de mayo a las 20:45 horas en el teatro Milán.