Quito. La justicia de Ecuador abrió una nueva investigación contra el ex presidente Rafael Correa por presunta malversación de fondos en el marco del caso Sucre, un entramado de corrupción en torno a Alex Saab, presunto testaferro del presidente venezolano, Nicolás Maduro.

La Fiscalía notificó el viernes al ex mandatario de la apertura de una nueva pesquisa en su contra. Correa confirmó en su cuenta de Twitter: “Me acaban de notificar con indagación previa del caso Sucre, una cantinfleada más (ya van 48) pagada por el pueblo ecuatoriano”. Agregó que la justicia de Ecuador es un circo y que miembros de la mayoría de la Comisión de Fiscalización son parte de los payasos.

Correa reside en Bélgica, pese a haber sido condenado a ocho años de prisión en Ecuador por su implicación en un caso de sobornos.

La Comisión de Fiscalización del Parlamento señaló en un informe la existencia de exportaciones ficticias de la empresa Fondo Global mediante el Sistema Unitario de compensación Regional (Sucre), mecanismo adoptado en 2009 que permitía el comercio virtual entre países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP). Sucre era una alternativa al dólar, pero se habría utilizado para blanquear más de 2 mil millones dólares.

De esta forma, Saab habría utilizado al esquema de compensación de los países del ALBA para lavar dinero vía el pago por exportaciones ficticias entre Ecuador y Venezuela.

Las transacciones se hacían con la presunta complicidad de más de una treintena de altos cargos del gobierno Correa sostiene que las acusaciones son un complot.

Defiende Maduro a Saab

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó a Estados Unidos de destruir el diálogo entre la oposición y su gobierno que tenía lugar en México al secuestrar a Saab.

Durante la entrevista con el periodista español Ignacio Ramonet, el mandatario destacó que Washing-ton provocó la ruptura al extraditar ilegalmente al Saab, quien estaba detenido en Cabo Verde por la Interpol.

Indicó que el abogado colombiano es aún uno de los representantes de la mesa de diálogo, y por ello tendría que haber grandes cambios para que volviéramos allá.