Desde ayer el costo de los cigarros y refrescos observó un incremento en su precio debido a la actualización que realizó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) al impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS).

Como cada año, la dependencia federal modificó los montos del tributo que se paga por cada pieza de tabaco labrado, litro de bebidas saborizadas y también gasolinas, aunque en el último caso se aplica un subsidio federal para minimizar el impacto en el costo de los energéticos.

Hasta el último día de 2021, el IEPS aplicado a cada cigarrillo era de 0.51 pesos y a partir del sábado –cuando entró en vigor el acuerdo publicado por la SHCP– se ubicó en 0.54 pesos.

En el caso de los refrescos y otras bebidas azucaradas el impuesto hasta el viernes era de 1.30 pesos, pero a partir del primer día de 2022 pasó a 1.39 pesos.

Según los precios publicados por las principales cadenas de tiendas de autoservicio en el país, el costo de los refrescos y cigarrillos aún no había sido actualizado, es decir, se mantienen los precios vigentes hasta el viernes.

Sin embargo, en pequeños negocios el cambio en el impuesto comenzó a aplicarse, pues una cajetilla de 20 cigarros que hasta el viernes costaba 59 pesos, ahora se paga en 62 pesos. El costo de los refrescos también aumentó.

También los combustibles

De acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT) el IEPS es un gravamen que se paga por la producción y venta o importación de gasolinas, alcoholes, cerveza y tabaco, entre otros bienes.

El tributo es indirecto, es decir, los contribuyentes no lo pagan directamente, sino que lo trasladan o cobran a sus clientes.

No se trata de un nuevo impuesto, sino que se modifica con base en el Índice Nacional de Precios al Consumidor correspondiente al dato publicado en los meses de noviembre del año en curso comparado con el pasado.

La SHCP también modificó el IEPS aplicable a combustibles, de tal forma que por cada litro de gasolina menor a 91 octanos o Magna el gravamen pasó de 5.11 pesos a 5.49.

Por igual cantidad de gasolina mayor a 91 octanos o Premium el IEPS aplicable pasó de 4.31 pesos a 4.63, mientras el diésel pasó de 5.62 a 6.03 pesos. En el caso de los combustibles el gobierno federal aplica cada semana un subsidio al IEPS, con el fin de suavizar el alza y evitar gasolinazos.