Martes 23 de noviembre de 2021, p. 6
La Feria del Libro de Fráncfort concluyó hace unos días con nuevos impulsos para los participantes y posibles negocios que antes no habían pensado para este año tan atípico. Espero que así sea también la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara
, sostiene Marifé Boix García, vicepresidenta del encuentro libresco alemán.
Destaca en entrevista que son las primeras ferias que acontecen de manera física; sin embargo, la parte digital también ha venido para quedarse. No nos podemos desentender y ya no hacer nada digital. Tenemos que encontrar el equilibrio
. Otro de los puntos importantes es el financiamiento, pues hasta ahora todo lo digital es gratis y acoplarlo al modelo de negocio de una feria va a ser difícil.
Boix García menciona que la de Fráncfort “ha sido una experiencia muy interesante. Sobre todo para marcar presencia, igual de los organizadores y de los que han participado como sector, como diciendo: ‘aquí estamos y aquí queremos volver a echarnos sobre la calle’”.
Relató que la feria de Fráncfort recortó una tercera parte de su equipo, otro tercio fue enviado a su casa con algunos apoyos económicos eventuales y el resto continúo con su trabajo.
La funcionaria afirma que la realización ha sido extraña, pues hemos estado trabajando con la idea de hacer algo más o menos igual que antes, pero, obviamente, nada lo es
.
Recuerda que los pasillos y los estands tuvieron el doble de ancho que antes, el aforo se redujo a un tercio en el recinto ferial, entonces ya se sabía que los 25 mil asistentes se iban a diluir e iba a parecer vacío. Me daba un poco de miedo
.
Marifé Boix agrega que como organizadores vivieron momentos de inseguridad, pues dieron facilidades a los expositores: “Podían cancelar a última hora sin recargos, eso implica que en cualquier momento digan: ‘tengo 24 metros reservados, pero no vengo’”.
Refiere que los participantes notaron que la diferencia: No tenían las agendas tan llenas, claro, pero también iban con menos expectativas, y pasó que se han encontrado personas que en otras ocasiones nunca habrían tenido la oportunidad
, pues no asistieron muchos desde Estados Unidos e Inglaterra.
Quien aprovechó esta situación fue Francia, que ha hecho más negocio que en cualquier feria anterior en esta situación de pandemia y en un encuentro que estaba más vació que nunca. Ha sido un reinicio.