Capital
Ver día anteriorViernes 12 de noviembre de 2021Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Repudian locatarios del mercado Mixcalco quita de espacio; temen más pérdidas

Pretenden darlo a la IP // Ropa china desplazó a la confeccionada en México, acusan

 
Periódico La Jornada
Viernes 12 de noviembre de 2021, p. 35

Con 63 años de vender lo hecho en México, locatarios del mercado Mixcalco tratan de mantener vigente su oferta: artículos sociales como ropa para bautizos, confirmaciones, primera comunión, trajes, vestidos de noche y de 15 años, por lo que se oponen a la desincorporación de 620.33 metros cuadrados de terreno que, dijeron, les significará mayores pérdidas.

Suéteres conocidos como borregas traídos de Chiconcuac y chamarras de Huexotla, prendas con las que inició la venta en el mercado, se siguen ofreciendo; sin embargo, ya no se ven esos talleres que producían a gran escala debido a la llegada de ropa china y la comercialización que hacen los judíos, manifestaron.

Los vendedores recordaron que de Mixcalco salían pedidos a toda la República Mexicana, pero algunos clientes lamentaron que ahora eso se ha perdido.

Julio César Lucas, locatario del mercado, recordó los tiempos de bonanza: “Sí hubo una época de oro, por los años 90 de aquí salieron muchos ricos. Se hacía la ropa para distribuir a corporativos.

Muchos de los comerciantes que se instalaron alrededor del mercado trabajaron aquí, se tenían producciones de uniformes de bancos y de grandes empresas, narró el vendedor de trajes.

También en las campañas se han hecho chamarras y camisas para candidatos de diferentes partidos políticos, expuso.

Alicia, vendedora de vestidos de ocasión, comentó que ha sido difícil mantenerse durante la pandemia porque las reuniones y eventos sociales se suspendieron, y aunque la gente empieza a llegar, dijo que aún es muy poca.

Negocios familiares

Algunos comerciantes que empezaron el negocio de la confección de ropa con sus padres aún siguen la tradición porque se trata de un negocio familiar y los locales han pasado de generación a generación, agregó, por su parte, Isaías del Real.

Los locatarios temen que tras la desincorporación de 620 metros cuadrados de terreno con 157 de construcción, el mercado empiece a seccionarse, porque el espacio se utiliza como punto de concentración durante un sismo, de carga, de reunión e incluso para actos culturales.

Además, aún no tienen claro cuál es el espacio que fue considerado en esos metros de desincorporación, porque en el patio que desde el primero de octubre se encuentra custodiado por policías de Seguridad Ciudadana, están la recién construida subestación eléctrica, el Centro de Desarrollo Infantil y un depósito de desechos.

Los comerciantes no están de acuerdo con perder este espacio y aseguraron que también ya iniciaron una batalla legal para la defensa del mercado que, aseguraron, se pretende entregar a la iniciativa privada.