El consumo privado en México retrocedió en agosto, con lo que ligó su tercer mes a la baja, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este dato negativo provocado por el alza en los contagios durante las últimas semanas se da a pesar de que las restricciones sanitarias no han sido tan severas como en la primera y la segunda olas de la pandemia de Covid-19 en México.

De acuerdo con el Inegi, el consumo en el país retrocedió 0.6 por ciento durante agosto del presente año, frente al mes inmediato anterior con cifras desestacionalizadas para hacer comparables los periodos, con lo que se ubicó 1.4 por ciento respecto de su nivel máximo pospandemia en mayo de 2021 y 3.6 por ciento debajo en enero de 2020.

De acuerdo con el reporte del Inegi, el consumo en bienes de origen importado destacó por su reducción de 6.8 por ciento en agosto respecto a julio, cuando descendió 2.2 por ciento, y el de servicios de origen nacional cayó 0.4 por ciento en el octavo mes de 2021 respecto al mes previo, según datos ajustados por estacionalidad.

Ángel Huerta, analista económico de Ve por Más, explicó que el rebrote de la pandemia en el mundo acentúo la interrupción de las cadenas globales de suministro, afectando el desempeño de bienes importados.

En su variación anual, el consumo privado avanzó 9.6 por ciento en agosto con respecto al mismo mes de 2020, los crecimientos más importantes, por base de comparación, están en bienes duraderos y semiduraderos, tanto nacionales como internacionales.

A su interior, el gasto en bienes de origen importado ascendió a 20.9 por ciento en el octavo mes, con respecto del mismo mes de 2020, y el efectuado en bienes y servicios nacionales tuvo un alza de 8.2 por ciento (en los servicios subió 11.7 por ciento y en los bienes lo hizo en 4.7 por ciento), con relación a los del igual mes de 2020.

En enero-agosto, el consumo privado reportó un aumento de 8.7 por ciento, con un avance en consumo nacional de 6.6 por ciento e importado 27.9 por ciento.

No volverá a niveles prepandemia

Ángel Huerta prevé que “el consumo privado mejore parcialmente en la recta final del año, debido a la moderación en los contagios de Covid-19, el proceso de vacunación y mayor movilidad de la ciudadanía; no obstante, aseguró, no volverá a niveles prepandémicos en 2021, pues el gasto de los consumidores mexicanos ha sido afectado por la elevada inflación generalizada en los bienes y servicios.

Para Eduardo Suárez, analista económico de Scotiabank, el consumo se recupará conforme disminuya el riesgo relacionado al Covid- 19, como lo muestra el repunte dela confianza del consumidor de septiembre.

Sin embargo, el aumento de precios, junto con cierta incertidumbre respecto a las disrupciones en las cadenas de valor, suponen los principales riesgos a la baja en el consumo para los siguientes meses.