Martes 2 de noviembre de 2021, p. 23
Washington. La mayoría de la Suprema Corte de Estados Unidos señaló ayer que permitiría a los proveedores de servicios de aborto presentar una impugnación judicial a una ley de Texas que casi terminó con esta práctica en el segundo estado más grande de la nación, después de seis semanas de embarazo.
Pero no estaba claro qué tan rápido emitirá un fallo el tribunal, si pronunciará una orden que bloquee la ley que entró en vigor hace dos meses, o si solicitará a los proveedores que pidan a un tribunal inferior que la suspenda.
Cuatro de los nueve miembros de la Suprema Corte –el presidente, John Roberts, y los tres jueces progresistas–, manifestaron con anterioridad su deseo de congelar esta legislación que ha limitado drásticamente el derecho de las texanas a interrumpir el embarazo.
Después de casi tres horas de argumentos orales, dos jueces conservadores designados por el ex presidente Donald Trump, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett, también expresaron su escepticismo sobre la nueva normativa.
Los jueces parecieron reconocer que la posición de Texas es extrema y amenaza los cimientos de nuestra democracia constitucional
, comentó luego de la audiencia Marc Hearron, abogado de la organización Whole Woman’s Health, que opera cuatro clínicas en Texas.
Nos reconfortan las enérgicas preguntas planteadas, pero la realidad en el terreno es que los pacientes siguen sufriendo
, apuntó Julie Murray, abogada de Planned Parenthood.
Defensores y opositores al aborto se reunieron ayer en Washington frente a la sede de la Corte, con pancartas en las que se leían mensajes irreconciliables: El aborto es esencial
o Deja latir sus corazones
.
Desde el 1º de septiembre está prohibido abortar en Texas tan pronto se perciben los latidos del corazón del embrión, o sea, en torno a las seis semanas de embarazo, incluso en casos de incesto o violación.
El máximo tribunal de Estados Unidos reconoció en 1973 el derecho de las mujeres a abortar y especificó en 1992 que se aplica siempre que el feto no sea viable fuera del útero, es decir, alrededor de las 22 semanas de gestación.