Mexicali, BC., El costo de regularizar un auto chocolate será de alrededor de 2 mil 500 pesos, adelantó ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador al iniciar una gira de tres días por Baja California. Aunque la firma del decreto con todas las reglas para legalizar los miles de vehículos irregulares que circulan en el norte del país será este sábado en Ensenada, el mandatario señaló que todos los recursos recaudados se usarán para bachear las ciudades fronterizas.

En su primer acto del día, el mandatario inauguró el cuartel número cinco de la Guardia Nacional en la entidad, de 12 que se pretenden construir en los próximos años, y felicitó al gobernador Jaime Bonilla por su trabajo, al recordar que es una gira de despedida para el jefe del Ejecutivo estatal, quien termina su gestión de dos años el próximo 30 de octubre.

Legalizar los vehículos es también un asunto de seguridad, apuntó el mandatario, quien informó que en la firma del decreto estará el Secretario de Gobernación, y será entonces cuando se conozcan todos los detalles. El Presidente no dio cifras sobre el número de carros chocolates que circulan en la frontera; sin embargo, las organizaciones que aglutinan a quienes poseen este tipo de autos hablan extraoficialmente de 850 mil sólo en Baja California. Tampoco usó la palabra “chocolates”, se refirió a ellos como vehículos que no tienen papeles en regla.

El decreto de regularización, anticipó, incluye la realización de un registro de vehículos que permitirá demostrar la posesión con fines de seguridad, así como la cuota aproximada de 2 mil 500 pesos, cuya recaudación será para que los gobiernos locales lo usen en bacheo.

Advirtió que no se puede utilizar el recurso para camionetas Suburban, será para que no haya baches.

La visita de López Obrador se da en el contexto de la transición del poder estatal, donde Jaime Bonilla y la gobernadora electa han tenido varios encontronazos por temas como la municipalización del agua y la reciente condonación de adeudos al Issstecali de los municipios de Ensenada y Tecate. El Presidente felicitó a Bonilla, pero también adelantó que apoyará a Marina del Pilar Ávila en su próxima encomienda.

“Sería frustrante que se hubiese continuado con más de lo mismo –dijo en referencia a la gestión de Bonilla–, que no se hubiera puesto el ejemplo”, al respaldar al mandatario estatal, de cuya actividad hablan los hechos.

Estoy seguro que hacia adelante va a ser lo mismo, vamos a seguir llevando adelante la transformación de Baja California, la transformación de México, apuntó.

Bonilla ha expresado públicamente sus dudas sobre el rumbo que tendrá la entidad, como parte de las diferencias con la gobernadora electa. Ávila ha guardado silencio ante las acusaciones.

El jefe del Ejecutivo vino acompañado de la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, y el general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, originario de esta ciudad, y quien tuvo a su cargo la explicación de los objetivos de la Guardia Nacional, que cuenta ya con 200 cuarteles en todo el país.

En Baja California, informó el general, hay mil 800 efectivos de la Guardia Nacional que llegaron de diversos estados del país para coordinarse con cerca de 4 mil soldados de tierra y aire, además de mil 500 marinos y los 8 mil policías estatales y municipales destacamentados en esta parte de la península.

Hoy podemos ver a una Guardia Nacional que con sus 100 mil mujeres y hombres avanza paulatinamente hacia su consolidación total, rigiéndose por una doctrina policial fundada en el servicio a la sociedad, disciplina, irrestricto respeto a los derechos humanos y un profundo compromiso con México.

En Tecate, el Presidente volvió a referirse a la transición local: Vamos a apoyar a Marina (Ávila) para que supere a Jaime (Bonilla). Aquí el contexto fue la presentación de programas para el bienestar.

López Obrador fue interrogado sobre la posibilidad de que Bonilla se una al gabinete, a lo que sólo respondió: Voy a hablar de eso mañana (hoy) con Jaime. Localmente se ha comentado que el aún gobernador podría no volver a su escaño en el Senado y sumarse al equipo del mandatario.