El saldo de la cartera vencida de los préstamos destinados al consumo de los hogares mexicanos se situó en agosto en 27 mil 839 millones de pesos, lo que representó un incremento marginal de 2.4 por ciento con respecto al mismo mes pero del año previo, revelan cifras oficiales del Banco de México (BdeM).

No obstante, los datos demuestran que el saldo vencido lleva siete meses a la baja y se trata del monto más bajo desde septiembre de 2020.

El saldo vencido representa 2.8 por ciento del saldo vigente total del portafolio que es destinado al consumo de las familias, que hasta agosto se situó en 982 mil 250 millones de pesos.

De acuerdo con el banco central, en el segmento de tarjetas de crédito, el monto vencido ascendió en el octavo mes del año a 8 mil 790 millones de pesos, lo que representó un ligero aumento de 2.8 por ciento con respecto del mismo mes del año pasado. Sin embargo, el segmento también lleva siete meses con una tendencia a la baja.

Así, como proporción del saldo vigente del portafolio de tarjetas de crédito, que es de 355 mil 930 millones de pesos, el índice de impago es de 2.4 por ciento.

En el segmento de los créditos que son otorgados a los trabajadores por medio de sus nóminas, la cartera vencida se colocó en 6 mil 339 millones de pesos. Aquí, hubo un aumento de 23.5 por ciento con respecto a agosto de 2020 y sólo lleva tres meses con una tendencia a la baja.

Al tomar en cuenta que el portafolio vigente en este tipo de financiamientos es de 261 mil 468 millones de pesos, la cartera vencida representa 2.4 por ciento.

Para los financiamientos personales, el monto de cartera vencida en agosto fue de 8 mil 13 millones de pesos, una reducción de 11.9 por ciento con respecto a lo reportado en el mismo mes del año pasado. La tendencia a la baja en este segmento lleva seis meses.

Estragos económicos de la pandemia

Cabe recordar que el financiamiento que es destinado al consumo de las familias mexicanas es uno de los que más se ha visto afectado por los estragos que dejó la crisis de la pandemia de Covid-19 y, a decir de los representantes de la baja, la desaceleración en la colocación de este tipo de préstamos se debe a que las familias, en el momento más severo de la emergencia sanitaria prefirieron ahorrar recursos y hasta el momento no los han gastado.

Por su parte, en el segmento de créditos destinados para la adquisición de bienes de consumo duradero, que incluyen los financiamientos automotrices y para la adquisición de bienes inmuebles, el saldo vencido es de 4 mil 282 millones de pesos, un aumento de 24.6 por ciento respecto de agosto de 2020.

En este sentido, como proporción del saldo vigente en el segmento, que es de 165 mil 300 millones de pesos, el índice de impago en los préstamos para la adquisición de bienes inmuebles es de 2.5 por ciento.

Así, las instituciones bancarias esperan que en el último trimestre del año y el primero del siguiente el impago en este tipo de créditos comience a reducirse y la demanda por los mismos vaya al alza.