Ante el llamado del presidente Andrés Manuel López Obrador a que las instituciones de educación superior vuelvan a clases presenciales, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) reconoció la necesidad de regresar a las aulas y así ha sucedido desde hace semanas.

Destacó que la máxima casa de estudios no se detuvo un solo día en este periodo de pandemia de Covid-19. No obstante los enormes retos y desafíos que trajo la crisis sanitaria, cumple cabalmente con las y los universitarios y con México, respetando la vida académica interna de la universidad, aseveró.

Indicó que el retorno a las instalaciones ha sido respetando los acuerdos tomados por los consejos técnicos de las diferentes escuelas y facultades y los correspondientes a los subsistemas de Humanidades, de la Investigación Científica y de la Coordinación de Difusión Cultural, con el fin de que sea gradual y seguro. Lo anterior, agregó, se ha cumplido, en particular en aquellos casos en los que la asistencia física de estudiantes y docentes se hace indispensable.

En un comunicado, también resaltó que la presencia física de la comunidad continuará creciendo con las medidas sanitarias necesarias y, como se informó desde un inicio, el regreso a las aulas se intensificará una vez que el semáforo epidemiológico pase al co-lor verde.

La UNAM puntualizó que la asistencia presencial del estudiantado seguirá siendo voluntaria y, para quien no pueda, las clases continuarán impartiéndose a distancia, como ha ocurrido desde el primer día de confinamiento.

Expuso que ha sido y es una institución educativa que cuenta con una estructura horizontal, tanto para sus decisiones académicas como para la administración y supervisión de los recursos públicos. Para el efecto cuenta, en los distintos niveles de responsabilidad y decisión, con cuerpos académicos colegiados electos por las diferentes comunidades, donde se analizan y debaten, en forma libre y plural, los asuntos de su competencia y se toman decisiones a través de mecanismos democráticos.