Un total de 37 personas resultaron lesionadas por un grupo de mujeres que con el rostro cubierto incursionaron de manera violenta en la movilización que realizaron diferentes colectivos feministas que partieron de diferentes puntos de la Ciudad de México y confluyeron en el Zócalo, sin que se reportara ningún detenido.

La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desglosó que 27 de las personas heridas son mujeres policías, de las cuales cuatro requirieron traslado a hospitales; una trabajadora de la Secretaría de Gobierno y nueve peatones, de los cuales cinco son del sexo femenino y cuatro hombres.

En una tarjeta informativa que emitieron la SSC y la Secretaría de Gobierno, señalaron que fueron desplegadas un total de mil 100 mujeres policías, quienes dieron encauzamiento a la marcha para proteger la integridad de las participantes y población en general.

Las autoridades indicaron que la mayor parte de la marcha se desarrolló en calma, pero un grupo de personas con la cara cubierta utilizó artefactos explosivos, martillos, palos y otros objetos peligrosos.

Las policías sólo portaron equipo de protección personal, casco y escudos, y en algunos momentos utilizaron extintores, con lo que refrendó que las uniformadas no utilizaron gases lacrimógenos.

Precisaron que los grupos que buscaban la violencia no encontraron eco entre los participantes, quienes se pronunciaron en su mayoría por una protesta pacífica, al reconocer el trabajo de las mujeres policías que participaron conteniendo la violencia y protegiendo a las manifestantes y a la población.

En el Ángel de la Independencia, las jóvenes esbozadas intentaron tirar las vallas metálicas que protegían el monumento con martillos, llaves inglesas y cohetones, y después, en su trayecto al Zócalo, aventaron botellas y huevos rellenos con pintura roja a las policías que las custodiaban, y realizaron destrozos en estaciones del Metrobús.

Ya frente al Palacio Nacional, quitaron las vallas metálicas que resguardaban un tramo del inmueble, e incluso despojaron a las policías de sus escudos, pero no lograron sortear el cerco policiaco.