Morena y la oposición en el Senado respaldaron a los 31 investigadores del Conacyt acusados de delitos patrimoniales, pero, mientras PAN, PRI, MC y PRD exigieron la comparecencia del titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, y cesar la persecución a los científicos, el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, llamó a la moderación y la prudencia, para no crear una mayor crispación social.

Pidió a Gertz Manero y a la directora del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla, actuar con juicio, moderación y prudencia y se deslindó de la propuesta del senador Armando Guadiana, quien ayer planteó que la Auditoría Superior de la Federación y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) investiguen los fondos, tanto federales como estatales que van a dar a las universidades autónomas de todas las entidades, incluyendo la UNAM.

Poco después, el coordinador Monreal le respondió que tal planteamiento le parece no sólo una exageración, sino un despropósito para los que hacen ciencia en este país, ya que hay que fortalecer las universidades, no perseguirlas.

El coordinador Monreal manifestó que, como profesor universitario que es, se solidariza plenamente con los 31 investigadores y aunque no puede negar la existencia de probables conductas antijurídicas, recordó que la presunción de inocencia prima por encima de todo.

Pidió también a la oposición “no sacar raja política de ello, ya que mientras ofrecía su conferencia de prensa, senadoras del PAN le colgaron enfrente una enorme manta con la leyenda: Alto a la persecución de científicos.

Los panistas colocaron cartones, con ese mismo lema en sus escaños y durante la sesión insistieron en ese tema. Antes, en conferencia de prensa, el coordinador del PAN, Julen Rementería, solicitó la comparecencia del fiscal Gertz Manero.

En tribuna, Nadia Navarro (PAN), Beatriz Paredes (PRI) y Miguel Ángel Mancera (PRD) exigieron que cese la persecución y haya una verdadera aplicación de la justicia.

Que se aplique la ley con las responsabilidades pertinentes, si es que existen, y se agoten las investigaciones, pero que no se usen subterfugios, no se lesione a quienes se han dedicado a servir a la sociedad con la investigación científica y la función académica, vinculándolos con asuntos que están muy lejos de la naturaleza de sus actividades, resaltó Paredes.