La pandemia de Covid-19 y sus efectos, sobre todo en la población más vulnerable, pone en alto relieve la necesidad de replantear los entornos, la equidad, la inclusión y el respeto a la diversidad, aseveró José Antonio de los Reyes Heredia, rector general de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

En la inauguración virtual del foro y diplomado Diálogos sobre accesibilidad para personas con discapacidad, María Guadalupe Huacuz, titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios de la esa casa de estudios, destacó que una encuesta interna arrojó que las problemáticas de salud visual son las de mayor ocurrencia.

Este aspecto es de mucha importancia, dada la situación de emergencia sanitaria que atravesamos, en la cual la mayor parte de nuestra vida social y académica se ha volcado al uso de las tecnologías. El sondeo expuso que 7.5 por ciento de la población universitaria padece alguna condición de discapacidad, y la situación más veces manifestada fue realtiva a trastornos oculares, con 57.8 por ciento, detalló.

Otras situaciones referidas son movilidad física (9.1 por ciento), lo que debe considerarse ante el inminente regreso a las clases presenciales, así como las sicosociales y auditivas, 5.2 por ciento.

“En menor proporción se mencionó la depresión como discapacidad (1.9 por ciento); la ansiedad, la vejez y las enfermedades cardiacas, que se perciben también como razones de minusvalía, fueron manifestadas por 1.3 por ciento de los encuestados.

Estos datos nos alertaron, sobre todo el tema de los problemas sicoemocionales, como tareas pendientes a resolver, pues se han agudizado o aumentado durante la pandemia.

Asimismo, el rector resaltó que la UAM ha hecho esfuerzos por asistir ante diversos problemas que atentan contra los derechos humanos, como la violencia de género, la discriminación y el racismo y ha pugnado por la accesibilidad para las personas con discapacidad.

Expuso que la crisis sanitaria y el confinamiento por el Covid-19 han agudizado muchos de los fenómenos que padecemos en el mundo, de tal manera que ya fue calificada como sindemia, debido a las graves repercusiones políticas, sociales y económicas que ha tenido, sobre todo en la población más vulnerable. En su opinión, se trata de la etapa más difícil de la historia moderna.

De los Reyes Heredia añadió que, en concertación con los rectores de las cinco unidades universitarias, se planteará que desde el colegio académico avancen los aspectos generales para crear políticas que favorezcan la inclusión, y destacó que en la Ley General de Educación Superior también debe haber criterios para la accesibilidad.