Zacatecas, Zac., ¿Dónde están?, se lee en la plaza de armas de esta ciudad, frase que con prendas y zapatos de personas desaparecidas formaron sus familiares, ayer, durante una protesta convocada por el movimiento Por Nuestros Desaparecidos en México.

El activista Ricardo Bermeo dijo que no se debe dejar pasar la oportunidad de que la ciudadanía tome conciencia de lo preocupante que es este fenómeno.

Y para que no quepa duda, señala que en Zacatecas hay 2 mil 52 personas ausentes y más de mil que han sido localizadas muertas en fosas clandestinas, pero debido a que no han sido identificadas, han terminado en la fosa común o se encuentran disponibles en las morgues forenses de las ciudades de Fresnillo y la capital del estado, para que algún familiar acuda a reconocerlos. En entrevista con La Jornada, Ricardo Bermeo, integrante del Consejo Ciudadano del Mecanismo Estatal de Búsqueda de personas, agregó que los municipios con mayor número de ausentes son Guadalupe y los dos ya mencionados; 68 por ciento son hombres y el resto mujeres, sobre todo jóvenes. Las mujeres tienen de 14 a 25 años.

Aun con la llovizna y el frío, decenas de familiares de desaparecidos pertenecientes a los colectivos Familias Unidas en Busca de Esperanza, Zacatecanos y Zacatecanas por la Paz y Amor, Esperanza y Lucha, sobre todo mujeres, utilizaron ropa y zapatos (algunas pertenecientes a los ahora desaparecidos) para formar la frase: ¿Dónde están?

Con la protesta, agregó, no sólo se intenta visibilizar este grave problema social, sino también se pretende presionar a las autoridades de todos los órdenes y niveles para que se mejoren las políticas públicas. Bermeo agregó que con la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas y sus agentes del Ministerio Público especializados en desaparición de personas, los grupos de búsqueda de familiares han trabajado conjuntamente desde 2018.

Pero el problema más importante, dijo, es que las autoridades están rebasadas por la carga de trabajo, pues para buscar a más de 2 mil desaparecidos aquí hay sólo cuatro agentes ministeriales, es decir, cada uno está al frente de más de 500 carpetas de investigación y son respaldados sólo por 10 policías de investigación.