El técnico Luis Alfonso Sosa confesó frustración y molestia por el desplazamiento que los clubes de la Liga Mx han hecho con los estrategas mexicanos. Tras el cese de Héctor Pity Altamirano del Querétaro, tras la derrota ante Pachuca, sólo quedan cuatro timoneles nacionales en los 18 clubes del máximo circuito: Víctor Vucetich, Javier Aguirre, Miguel Herrera y Guillermo Vázquez.

En paro desde hace un año, luego de haber sido cesado del Necaxa, el también abogado egresado de la Universidad de Guadalajara puntualizó: No quiero llegar a la condición de regalar mi trabajo. Donde nos toque estar en la vida hay que tener dignidad, porque muchos (técnicos) prácticamente hoy están trabajando gratis y no es lo correcto.

Alabó la postura de algunos estrategas, como Raúl Arias y Raúl Potro Gutiérrez, quienes dirigen en Guatemala y Honduras. Salir es parte de nuestra actividad, nunca hemos estado cerrados a la opción de ir a otros lados. La realidad es ésa, si hay un ofrecimiento afuera y es interesante, se toma; es parte del desarrollo y crecimiento de los entrenadores.

No obstante, reflexionó: a los técnicos mexicanos nos ha tocado picar piedra, cuesta muchísimo que te den un trabajo en buenas condiciones. No hay meritocracia; otros vienen de afuera y les ponen en bandeja de plata lo que a ti te ha costado gran esfuerzo. Se nos tiene poca paciencia.