Dortmund. El Bayern Múnich derrotó ayer 3-1 al Borussia Dortmund para conquistar la Supercopa de Alemania por segundo año consecu-tivo, liderado por su goleador polaco Robert Lewandowski, quien mar-có un doblete.

Se esperaba ver a un estelar Erling Haaland, pero fue la fría eficacia de Lewandowski lo que decidió el klassiker.

Los bávaros marcaron la diferencia en los momentos clave del partido: al final del primer tiempo, con un remate de cabeza del polaco al minuto 41, y poco después de la reanudación por medio de Thomas Muller al 50 a puerta vacía.

Marco Reus dio esperanzas por momentos al conjunto de la cuenca del Ruhr con una anotación al 64, pero Lewandowski culminó su recital ante su ex equipo al 74, aprovechando un error de la zaga rival.

Tras este nuevo título, el Bayern, ganador de cinco de las seis recientes Supercopas, se distancia aún más de su rival de ayer en el palmarés, con nueve trofeos deja muy atrás al Dortmund que acumula seis.

En el Signal Iduna Park, ante 25 mil espectadores autorizados, ambos equipos lucieron brazaletes negros en señal de luto por la muerte el pasado domingo de la leyenda del futbol alemán Gerd Müller.

Rinden homenaje al Bombardero

Antiguo jugador del Bayern, el conjunto de Julian Nagelsmann homenajeó al Bombardero de la Nación mostrando camisetas con su nombre y su dorsal 9 antes del inicio de partido.

El Bayern, con una presión asfixiante, se procuró las primeras ocasiones gracias a la recuperación de balones cerca del área. Primero Thomas Müller y después Kingsley Coman mantuvieron el peligro ante el arco de Gregor Kobel.

Pero fue Lewandowski quien definió la diferencia sobre el campo. El polaco recetó un potente cabezazo para adelantar al Bayern, y también fue el que sentenció el choque; lo hizo con clase y tranquilidad desde dentro del área al arquero rival.

El astro polaco mantiene la inercia de la temporada pasada, en la que consiguió 41 goles en 29 partidos, y superó el récord de anotaciones en una temporada que ostentaba precisamente el memorable Gerd Müller.

Significa mucho para mí. Ha debido ser un partido realmente atractivo para los espectadores, declaró el protagonista del choque.

Por su lado, Haaland, de 21 años, no pudo completar ninguna de las arremetidas en el enésimo momento dulce de su carrera, con cinco goles en sus anteriores presentaciones en la grama.

Nagelsmann tuvo un comienzo difícil con el Bayern, que no ganó uno solo de sus cuatro partidos amistosos de pretemporada e igualó el viernes ante el Borussia Mönchengladbach en el partido que dio inicio a la nueva temporada de la Bundesliga.

Es una victoria muy importante para los chicos, afirmó el ex entrenador del Leipzig al término del partido.