Bruselas. Alemania, Francia e Israel seguirán adelante con sus planes de inyectar refuerzos de las vacunas sin tener en cuenta el llamado de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de esperar hasta que haya más personas inmunizadas en el mundo.

La decisión de seguir adelante con inyecciones de refuerzo, a pesar de la declaración más contundente de la OMS, hasta ahora destaca las enormes desigualdades en las respuestas a la pandemia a medida que las naciones más ricas extienden sus programas para proteger a sus poblaciones de la variante delta, más infecciosa.

El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que Francia trabaja en aplicar terceras dosis para las personas mayores y vulnerables a partir de septiembre. Alemania También tiene la intención de dar refuerzos a los pacientes inmunodeprimidos y adultos mayores a partir de ese mismo mes, dijo el Ministerio de Salud. En tanto, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, instó a los ciudadanos mayores de 60 años a recibir una tercera inyección, después de que el mes pasado el gobierno inició una campaña para ofrecer dosis de refuerzo.

El jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo antier que es inaceptable que los países ricos usen los escasos suministros mundiales de vacunas para terceras dosis.

En tanto, la Comisión Europea dijo ayer que la decisión de administrar una tercera dosis para reforzar la inmunidad frente al Covid-19 debe ser tomada por los Estados miembros, a los que pidió que al valorarlo sigan las evidencias científicas y las recomendaciones de la Autoridad Europea del Medicamento (EMA).

En esta línea, la portavoz comunitaria, Arianna Podesta, recordó que la recomendación actual de la EMA es que la pauta completa se consigue con dos inyecciones de las vacunas desarrolladas por Pfizer/BioNTech, Moderna y AstraZeneca y con una en el caso del suero de Janssen.

En cualquier caso, Podesta defendió que la UE esté firmando nuevos contratos con diversos laboratorios para asegurarse el suministro de dosis adicionales que puedan ser necesarias ante una posible vacunación de refuerzo o para hacer frente a nuevas variantes del virus. Además, recordó a los países del bloque comunitario que siempre podrán decidir donar una parte de dichas dosis a terceros países que se encuentren retrasados en sus campañas de vacunación.

Más allá del debate sobre la tercera inyección, el Ejecutivo comunitario aseguró que es crucial que todos los Estados miembros sigan trabajando para alcanzar el objetivo de haber vacunado a 70 por ciento de la población adulta europea antes de que finalice el verano.

La farmacéutica Moderna considera que probablemente será necesaria la administración de una tercera dosis de la vacuna antes de la temporada de invierno, debido a la aparición de la variante delta.

Estados Unidos trabaja para ofrecer lo más rápido posible dosis de refuerzo a sus ciudadanos con sistemas inmunológicos comprometidos, dijo el principal experto en enfermedades infecciosas del país, Anthony Fauci.

Estados Unidos subió a un máximo de casos en seis meses, con 100 mil nuevos casos notificados el miércoles y un nuevo brote de la variante delta haciendo estragos en Florida y otros estados con bajas tasas de vacunación, como Texas, Missouri, Arkansas, Louisiana, Alabama y Misisipi, dijo ayer el coordinador de Covid-19 de la Casa Blanca, Jeff Zients.

Florida, nuevamente epicentro de los nuevos contagios, batió ayer otro récord de hospitalización con 12 mil 373 camas ocupadas por pacientes confirmados de Covid-19, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos.

La cadena de hospitales del sur de Florida Memorial Healthcare System suspendió las cirugías electivas e instaló camas en salones de conferencias, un auditorio e incluso una cafetería ante el creciente número de enfermos.

Las personas vacunadas en Chile con doble dosis de la vacuna china CoronaVac recibirán una tercera dosis de las vacunas AstraZeneca o Pfizer/BioNTech para reforzar su inmunización, confirmó el presidente Sebastián Piñera.

En Cuba se empezó a vacunar a las embarazadas y madres lactantes con el fármaco local Abdala a medida que se incrementan los contagios.

Las autoridades de Melbourne anunciaron el sexto confinamiento para esta ciudad australiana, mientras Sídney registró una cifra récord de nuevos casos y el país trata de controlar la virulenta variante delta.

La pandemia ha dejado 200 millones 670 mil 720 casos confirmados y 4 millones 263 mil 828 muertos en el mundo.