La Orquesta Sinfónica de Minería (OSM) regresó con su tradicional Temporada de Verano, interrumpida el año pasado debido a la contingencia sanitaria mundial. La de 2021 es una temporada virtual, comenzó el 3 de julio y concluye el 15 de agosto y sus siete programas están pensados a manera de homenajes.

Todo esto que estamos viviendo nos ha llevado a reflexionar y a agradecer a tantas personas por lo que han hecho y siguen haciendo por nosotros, expresó Carlos Miguel Prieto. Para el director artístico de la OSM, cada programa representa una oportunidad, ya sea de homenajear a quienes se entregan por los demás o de celebrar a los que lo han hecho en el pasado en cosas relacionadas con nuestro quehacer, que es la música.

El primer programa de la Temporada de Verano 2021 –3 y 4 de julio– fue un homenaje a Aaron Copland y a Carlos Chávez, aunque en realidad hizo hincapié en una relación bilateral y el concepto de trabajo en equipo entre dos países. Para Prieto, el ejemplo nos lo dieron Copland y Chávez en los años 30 y 40: su amistad y trabajo estrecho dieron gran cantidad de obras y se promovió la música mexicana alrededor del mundo.

En el programa se incluyen también obras de Leonardo Velázquez y Samuel Barber.

El segundo programa –10 y 11 de julio– incluirá música de Saint-Säens, Villa-Lobos, Piazzolla y Prokofiev. El tercer programa –17 y 18 de julio– será un homenaje a Francia, ya que coincide con la semana del aniversario de la toma de la Bastilla, que significa mucho para la historia de ese país y para la humanidad, apuntó Prieto. Habrá música de Debussy, Ravel e Ibert.

En el cuarto programa –24 y 25 de julio– se rendirá un homenaje al chelista Carlos Prieto. Tras varios años de insistencia de la Academia del Palacio de Minería, Carlos Miguel finalmente aceptó, con enorme gusto, al ver cómo su padre, junto con todas las personas de su generación pasaron un año muy difícil al tener que estar totalmente confinadas por su edad.

Carlos Prieto también es solista en el programa, ya que interpretará Canción en el puerto, obra que le comisionó al compositor Joaquín Gutiérrez Heras. Así, se rendirá tributo a la pasión que el chelista ha tenido siempre por comisionar obras a compositores mexicanos para el violonchelo, su instrumento.

También se interpretará música de Revueltas, Rachmaninov y Mozart. El director artístico apuntó que Sensemayá, de Revueltas, fue la única obra que no se grabó de manera presencial, ya que requiere de 100 músicos. Cada quien lo interpretó desde su casa. En todas las demás obras participaron de siete a 50 músicos.

El quinto programa –31 de julio y primero de agosto– es un homenaje a Bach, con música también de Vivaldi; en el sexto –7 y 8 de agosto– se rinde tributo a los héroes anónimos de la pandemia a través de las composiciones de Haydn, Mozart y Beethoven.

En el último programa –14 y 15 de agosto–, que será de gala, se recordará a las víctimas de la pandemia. El programa incluye Réquiem, de Mozart, con una duración de alrededor de 70 minutos y una intervención continua del coro. Prieto señaló: Utilizamos 16 personas, con el reto agregado de que todos tenían que usar cubrebocas por cuestiones de seguridad.

El director artístico consideró la grabación de los programas un esfuerzo exitoso en lo artístico y en cuanto a la salud, porque no se reportó ningún contagio. En la rueda de prensa también estuvo presente Luis Antonio Ascencio, presidente de la Academia del Palacio de Minería.

Para mayores informes sobre los conciertos se puede consultar la página www.minería.org.mx. Los conciertos serán transmitido en una fecha posterior por TV UNAM.