Frente a la indiferencia de la Federación Mexicana de Natación, un grupo de nadadores viajaron por su cuenta y riesgo a Europa, para encarar el último intento de lograr marcas olímpicas en el Mare Nostrum, certamen burbuja que se compone de tres competencias: los días 29 y 30 de mayo en Mónaco, 1 y 2 de junio en Rousillon, Francia, y 8 y 9 de junio en Barcelona, España.

Ha sido muy complicado porque las marcas establecidas son (en el rango de) los 32 mejores del mundo, y más difícil cuando no tienen apoyo de la federación, que no los ha tomado en cuenta para nada, aunque lograron muchas medallas Centroamericanas y Panamericanas, y en los últimos tres meses han roto 15 récords mexicanos, que ni siquiera han sido registrados (por la FMN), señaló Nelson Vargas, el legendario entrenador que respalda y acompaña al contingente que viajó con el impulso principal de sus familias, subrayó el empresario.

Destacó también que los nadadores también contaron con una partida que designó el presidente Andrés Manuel López Obrador, y 90 mil más para cada uno de los mexiquenses de parte del Instituto del Deporte de su estado, para encarar competencias en Brasil, EU y estas próximas en Europa.

Indicó que los más cercanos a lograr las marcas A de calificación son Gabriel Castaño en 50 metros libres, Melissa Rodríguez en 200 pecho, María Mata en 200 mariposa y Miguel de Lara en 200 pecho.

Mencionó que la FINA, que sí ha dado seguimiento a las marcas y récords de los mexicanos, podría girar invitaciones a los que ostentan marcas B y están dentro de los mejores 32.