La presidenta del grupo del Senado que dará seguimiento a las elecciones, Mónica Fernández, comentó que pondrán atención al comportamiento de las autoridades electorales, que de forma preocupante han actuado de forma parcial, para perjudicar al partido mayoritario.

La ex presidenta del Senado consideró que el Instituto Nacional Electoral (INE) ha dejado de ser el árbitro para ir grosera y descaradamente en contra de Morena, como lo demuestra el hecho de que quitar las candidaturas a los aspirantes a los gobiernos de Guerrero y Michoacán, Félix Salgado y Raúl Morón, por no haber reportado gastos menores a 20 mil pesos, pero se niega a intervenir en los casos de los candidatos de PRI y MC a la gubernatura de Nuevo León.

La senadora de Morena sostuvo que hay denuncias por presunto lavado de dinero y triangulación de recursos en contra de Samuel García, candidato de MC, que representan varios millones de pesos y del priísta Adrián de la Garza, por uso de programas sociales y el INE ya informó que no le va a entrar, pese a que se trata de delitos graves.

No puede ser tal grado de parcialidad

No puede ser, agregó, tal parcialidad de una supuesta institución democrática, de ahí que este grupo creado en el Senado para observar y dar seguimiento a las elecciones del 6 de junio próximo debe también estar al pendiente de cómo actúan las autoridades electorales.

Recalcó que ese órgano, integrado por 15 senadores y diputados no es una instancia de juicio ni calificadora, porque para eso están el INE, el Tribunal Electoral y la Fiscalía Especializada para los Delitos Electorales.

La obligación que tenemos es hacer un informe al final de este seguimiento, de esta observación a los comicios, con pleno respeto a la autonomía de las entidades y de las instituciones electorales.

El grupo, formado a propuesta de la oposición, en la Permanente, se instaló con 11 de los 15 legisladores que la conforman.

En el documento que da fe de la conformación de ente se destaca que el actual proceso electoral es considerado el más grande de la historia democrática del país, ya que podrán participar 93 millones de electores para renovar la Cámara de Diputados y diversos cargos en las 32 entidades federativas.