Con un aforo mínimo y aún en medio de la pandemia de Covid-19, el especialista en mercadotecnia deportiva Francisco San José consideró poco conveniente abrir los estadios capitalinos al señalar que pueden ser más altos los gastos de operación en un recinto frente a los ingresos de taquilla. Indicó que los clubes podrían tardar todavía uno o dos años en recuperarse económicamente.

Si se permiten pocos aficionados, puede salir más caro el caldo que las albóndigas. Aún es incierto el resultado por la reapertura del estadio Azteca, aunque al ser en liguilla puede ser positivo, pero hay seguidores muy difíciles de controlar, dijo el catedrático de la Escuela de Ciencias del Deporte de la Universidad Anáhuac.

“Cuando juegas a puerta cerrada, los costos de operación son mínimos, no ganas ni pierdes, pero al abrir los recintos puede haber más gastos que ingresos. El aforo permitido aún es poco y se debe considerar si los aficionados tienen los recursos suficientes para pagar un boleto o tienen el ánimo después de la situación que se vive.

Las ganancia de los equipos no viene sólo de la taquilla, están los derechos de televisión y los patrocinios, los cuales, derivado de la pandemia, se han renegociado o incluso varios se han ido por las afectaciones, indicó.