Javier Vasco Aguirre, técnico de Rayados, la libró a pesar de haber propiciado una gresca en el clásico regio, toda vez que el silbante no lo expulsó ni lo reportó en su cédula arbitral, y si no lo expulsaron ya no pasó nada, señaló el ex árbitro Armando Archundia, quien no descartó que la directiva de Tigres pueda presentar una protesta, sobre todo porque Carioca recibió cartón rojo.

“No es que sea Javier Aguirre, no se debe especular con que a Marco Ortiz le pesó este nombre, simplemente no vio la acción y es responsabilidad de todo el cuerpo arbitral y de la gente del VAR (videoarbitraje), pero hay antecedentes de estas actitudes, recordemos cuando el Vasco propinó una patada a un jugador de Panamá y fue expulsado por la Concacaf”.

Archundia mencionó que es buena la idea de dar fluidez al juego, como busca el directivo Mikel Arriola. Me parece bien, pero tenemos que acostumbrar a los jugadores; están habituados a que al mínimo contacto se tiran como fulminados por un rayo, si no les hacen caso, si el juez central no se engancha, se levanta como si no hubiera pasado nada.

Considera que los árbitros deben dar continuidad al juego con buen criterio. “Falta unificar procedimientos, porque en unos partidos lo hacen y en otros no; además, el videoarbitraje es una herramienta muy valiosa que les puede ayudar, aunque se sobrexpone, pues en faltas leves buscan hasta que encuentran la infracción y, en otras más fuertes, no ven nada.

“Por ejemplo, el penal marcado a favor de Tigres no era: Carlos González va y se estrella con Sebastián Vegas, él es quien busca el contacto, pero el árbitro toma una decisión equivocada, y tiene al videoarbitraje para rectificar, pero no se hizo.

En general falta preparación a los silbantes, eso le corresponde a Enrique Osses, director del área técnica, indicó.