La mandataria capitalina Claudia Sheinbaum pidió a quienes tengan un cargo público y que aspiren a relegirse o postularse a un puesto de representación popular, independientemente del partido político, se separen de sus funciones para garantizar que no se utilicen recursos del erario en sus campañas.

En videoconferencia, informó que al menos 10 integrantes de su gabinete participarán en el proceso electoral de este año, a quienes pidió que se separen del cargo; a su vez, los alcaldes de Morena que buscan relegirse harán lo propio una vez que se definan las candidaturas por medio de una encuesta entre militantes de ese partido.

Entonces, es algo que independientemente de la ley electoral, desde mi punto de vista, una vez que son candidatos de esos partidos, creo que valdría la pena que dejaran sus cargos para poder separar lo electoral del servicio público.

La Constitución y el Código Electoral locales disponen que, en el caso de las alcaldías, quienes busquen relegirse, así como legisladores de la capital y federales que contiendan para ese cargo, deberán separarse de sus funciones por lo menos 60 días antes del día de la elección, o sea a más tardar el 7 de abril, en tanto los diputados locales que van a participar de nuevo por el puesto no están obligados a dejar su curul.

En el caso de los de Morena inscritos para candidaturas a las alcaldías, de no resolver su situación antes del 17 de febrero y en caso de no ser favorecidos por el estudio de opinión, están en riesgo de quedarse sin un cargo, al no tener ya posibilidad de registrarse por diputaciones federales, cuyo proceso se cierra el 13 de febrero, y tampoco para relegirse en el Congreso local, que cierra el 17.

De los 12 alcaldes de ese partido que actualmente gobiernan y buscarán la relección, cinco van por su tercer periodo en Cuajimalpa, Miguel Hidalgo, Iztacalco e Iztapalapa, así como Gustavo A. Madero; en esta última, Francisco Chíguil se vio obligado a renunciar meses antes del término de su gestión –en junio de 2008– tras la tragedia del New’s Divine, donde 12 personas fallecieron.

En suma, los alcaldes de esas jurisdicciones acumularían nueve años de gobierno, a pesar de que el cargo más alto, por elección popular, que es el de Presidente de la República, sólo puede durar seis, ante lo consignado en la Constitución: Sufragio efectivo no reelección.