La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) decidirá mañana el futuro de uno de los primeros amparos promovidos contra la minera Grupo México por el derrame tóxico que ocasionó en el río Sonora, en agosto de 2014.

Los ministros de la Primera Sala resolverán sobre la forma en que los afectados pueden adherirse legalmente a la acción colectiva promovida ante tribunales para exigir la reparación de los daños causados por la minera.

Se trata de la demanda iniciada desde el año 2015 por la asociación civil Acciones Colectivas de Sinaloa.

El asunto avanzó sin mayores obstáculos hasta octubre de 2018, cuando se publicó el edicto, que tiene como finalidad divulgar la apertura del juicio, para que toda persona afectada pueda sumarse a él.

Sin embargo, cuando algunas de las víctimas quisieron unirse a la demanda, el juez de la causa rechazó su solicitud porque sus peticiones se hicieron llegar solamente por correo electrónico.

Contra esta determinación, Acciones Colectivas de Sinaloa presentó el amparo 311/2019, demandando que se establecieran claramente las reglas para este tipo de procedimientos.

Por lo novedoso del tema, el tribunal colegiado que conoció del asunto en apelación pidió a la SCJN que atrajera el caso, lo cual ocurrió en agosto del año pasado.

El fondo del asunto fue establecido por la Corte como definir las reglas para que una persona se adhiera a una colectividad que ha iniciado un proceso de acción colectiva en sentido estricto, lo cual implica determinar su alcance a la luz de los principios que rigen los juicios colectivos.

Según estudios de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), el derrame contaminó con arsénico, plomo y cobre las aguas de consumo humano y riego de ocho comunidades de la cuenca del río Sonora.