Ante la polémica acerca de las causas del apagón del pasado lunes, con lo del incendio o no, están generando todo un argüende, un zaperoco, aseveró el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien se pronunció por que se haga la investigación, se presente la denuncia para que una autoridad independiente resuelva. Sin embargo, consideró que el origen del diferendo es político-electoral, porque el gobierno de Tamaulipas tiene diferencias con nosotros.

Al referirse al suceso por tercera ocasión en la semana, en la conferencia mañanera del jueves pasado, López Obrador insistió en que la causa real de las críticas es la molestia porque se está rescatando la Comisión Federal de Electricidad (CFE), “porque ellos –y no estoy levantando falsos– son partidarios de la privatización de la industria eléctrica y del petróleo. De igual forma, como convirtieron –agregó– las plantas de petroquímica en chatarra, quisieran que con las de la CFE también ocurriera así.

Subrayó las diferencias entre la visión privatizadora y la concepción de su gobierno, que apuesta para que el sector energético sea palanca de desarrollo. Este es el fondo de la quema del pastizal, del apagón, ironizó después de leer la carta del presidente Adolfo López Mateos en ocasión de la nacionalización de la industria eléctrica.

Reiteró que el modelo neoliberal ya tuvo su tiempo sobre la base de privatizar las ganancias, pero nosotros pensamos que el sector energético es estratégico para el desarrollo independiente de México y que, si se fortalecen Pemex y la CFE, vamos a garantizar el desarrollo del país.