Bruselas. Los 27 países de la Unión Europea (UE) dieron luz verde ayer a la aplicación provisoria del acuerdo comercial pos-Brexit con Reino Unido a partir del 1º de enero, en espera de la ratificación parlamentaria formal en Londres y Bruselas, anunció un portavoz del bloque.

El primer ministro británico, Boris Johnson, dio la bienvenida al acuerdo y expuso que era un nuevo punto de partida para las relaciones entre ambas partes.

Los embajadores de la UE aprobaron por unanimidad la aplicación provisoria del Acuerdo de Comercio y Cooperación entre la UE y el Reino Unido, anunció en Twitter el portavoz de la presidencia en turno (alemana) del Consejo de la Unión Europea, Sebastian Fischer.

La aprobación por escrito de la autorización provisoria tendrá lugar hoy, añadió.

La intención de los representantes permanentes es permitir que el texto (de más de mil 200 páginas) sea publicado en el Diario Oficial de la UE lo antes posible, probablemente el jueves.

En Twitter, Johnson anunció que conversó con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y en la charla destacó que el acuerdo es un nuevo punto de partida para la relación bilateral.

Esperamos la ratificación formal del acuerdo y poder trabajar en prioridades compartidas, añadió el jefe de gobierno británico.

El 1º de enero el Reino Unido saldrá definitivamente del mercado común y la unión aduanera de la UE. El acuerdo firmado establece las nuevas normas que regirán a partir de esa fecha las relaciones comerciales entre ambas partes.

Del lado británico, el Parlamento podría ratificar el acuerdo esta semana, probablemente hoy.

En el Parlamento británico, la aprobación del acuerdo no debería, en principio, presentar grandes dificultades a raíz de la mayoría conservadora que apoya a Johnson, además del soporte dado al entendimiento de la oposición laborista.

El Parlamento Europeo, en tanto, advirtió que solamente estaría en condiciones de ratificar formalmente cualquier acuerdo antes del 1º de enero si tenía acceso al texto del entendimiento hasta el domingo 20 de diciembre.

Pasado ese plazo, se propone someter a votación la ratificación del acuerdo en febrero de 2021, posiblemente el 23, y por ello se tornó urgente aprobar la aplicación provisoria del tratado.

En una nota de prensa divulgada el lunes, el Parlamento Europeo señaló que el carácter provisorio de la aplicación del acuerdo no constituye un precedente ni reabre acuerdos asumidos entre las partes.

La autorización a la aplicación provisoria emitida, sin embargo, es válida únicamente hasta el 28 de febrero, a menos que las dos partes acuerden otro plazo.

En su nota, el Parlamento apuntó que decidió examinar la posibilidad de extender la aplicación provisoria más allá del 28 de marzo, para permitir la ratificación durante una sesión plenaria en marzo.

A partir de ahora, comentó la nota, las comisiones de Comercio y Relaciones Exteriores examinarán cuidadosamente el texto del acuerdo para preparar una moción antes de someterlo a voto. Además, el Parlamento pretende vigilar de cerca la aplicación del acuerdo en todos sus detalles.

Reino Unido abandonó la Unión Europea el 31 de enero de este año, aunque las partes acordaron entonces un periodo de transición hasta el 31 de diciembre para negociar cómo funcionaría la relación comercial a partir de 2021.

Esa negociación pareció avanzar sin mayores inconvenientes, pero en la recta final quedó trabada por diferencias aparentemente insalvables sobre derechos de pesca, normas de competencia y la gestión legal del eventual acuerdo.

En diciembre las negociaciones ingresaron en un momento crítico y varias veces parecieron estar al borde del colapso, aunque finalmente el 24 de diciembre las partes anunciaron haber alcanzado el acuerdo.

Con esta asociación económica y comercial, la UE ofrece a Reino Unido acceso sin aranceles ni cuotas a su mercado de 450 millones de consumidores, pero prevé sanciones y medidas compensatorias en caso de incumplimiento de sus normas.

En tanto, Andrew Locker, presidente de la federación nacional de organizaciones de pescadores británicos, manifestó sentirse traicionado tras la firma del acuerdo pos-Brexit.

El acuerdo prevé un periodo de transición hasta junio de 2026, tras el cual los pescadores europeos habrán cedido progresivamente hasta 25 por ciento de sus capturas, porcentaje mucho menor que el esperado por los británicos.

Por otra parte, los trabajadores transfronterizos que viajen entre Gibraltar y España estarán exentos de controles después del divorcio.