En un contexto en el que menos de uno por ciento de las denuncias por delitos electorales se judicializan y en el que no hay sancionados, el reto de la nueva Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales será profesionalizar las investigaciones y dar respuesta a todas las denuncias, afirmó su titular, Alma Elena Sarayth de León.

La fiscalía, que inició actividades formalmente el 22 de diciembre, ha comenzado la conformación de una estructura laboral en medio del desarrollo de las precampañas en la Ciudad de México, y cuya sede se encuentra en el búnker de la Fiscalía General de Justicia (FGJ).

En su primera entrevista con medios, la fiscal electoral explicó que en el proceso electoral de 2018 se abrieron más de 200 denuncias, de las cuales sólo se judicializó una y no fue a causa de un delito electoral.

Entre sus primeras acciones, dijo, está verificar el estado de las denuncias de aquel proceso y, en su caso, darles seguimiento a casi tres años de los hechos de violencia que se suscitaron en la alcaldía Coyoacán, cuando presuntos seguidores del PRD agredieron con sillas a simpatizantes de Morena durante un mitin de la entonces candidata y actual jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.

“Habrá que ver qué pasó con las denuncias del pasado, porque fue un llamado recurrente saber qué pasó; podríamos extraer del archivo para decir a los denunciantes qué pasó (…). Necesitamos ver el estado que guardan las denuncias porque tal vez algunas ya prescribieron o se mandaron al archivo, por lo que es necesario revisar cada una y, en caso de haber elementos, reactivarlas”, dijo de León Cardona.

De acuerdo con el aviso que publicó la FGJ, los actos, procedimientos, trámites y asuntos iniciados por la Fiscalía de Investigación Estratégica de Asuntos Especiales serán resueltos por la nueva fiscalía, por lo que se turnarán todos los que sean de su competencia. Debido a que apenas se iniciará la entrega-recepción, se desconoce el número de denuncias pendientes.

Además, anunció que esta semana se pondrá en marcha una campaña vía redes sociales para que la ciudadanía conozca las labores de la fiscalía y se faciliten los medios para interponer denuncias.

La idea de esta fiscalía es estar atenta, vigilante y mandar un mensaje de confianza a la ciudadanía para garantizar la eficacia, la libertad para ejercer su voto, y también mandar un mensaje de advertencia y de vigilancia a los actores políticos, a los servidores públicos y sujetos que son proclives a cometer este tipo de conductas. Y el mensaje es claro: no habrá impunidad para nadie y todo delito electoral será sancionado.