La Cámara de Diputados aprobará el jueves la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador para prohibir la subcontratación laboral, una vez que las comisiones de Hacienda y Trabajo avalen el dictamen mañana, acordó ayer la Junta de Coordinación Política.

La intención de Morena es aprobar el proyecto sin cambios, mientras en la primera de dos sesiones de parlamento abierto convocado por las comisiones, empresarios rechazaron el proyecto, pero acotaron que de aprobarse necesitarían al menos un año para la transición, por lo cual pidieron que no entre en vigor –como plantea el Ejecutivo– el primero de enero de 2021, sino en 2022.

En una sesión donde los representantes empresariales defendieron “el outsourcing bueno” y plantearon no satanizar esta figura, el director del Instituto del Fondo Nacional de Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), Carlos Martínez, y directivos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) resaltaron que la práctica de subcontratar personal afecta directamente a los trabajadores, así como las finanzas de ambas instituciones y sus servicios.

Carlos Martínez refirió que el abuso es tal, que un trabajador que está en un mismo centro de trabajo, por ejemplo un hotel, que acude a su centro laboral todos los días durante una década, puede tener 10 patrones en un año.

Eso implica, agregó, que no tiene continuidad laboral, lo que le impide solicitar un crédito de vivienda. ¿Qué clase de Estado queremos, si un trabajador que cotiza de manera discontinua porque le cambian de patrón sin avisar no tiene garantizado su futuro?, cuestionó.

La directora de Incorporación y Recaudación del IMSS, Norma Gabriela López Castañeda, explicó que las empresas de tercerización realizan pagos no auditables por el instituto, como honorarios, asimilados a honorarios y tarjetas bancarias que, sin ser nominativas, se utilizan para depositar los recursos para los trabajadores, o bien recurren a conceptos que no se integran al salario base de cotización para disfrazar el sueldo de los trabajadores.

Crecimiento desmedido

Hemos visto un crecimiento desmedido de los esquemas abusivos de la subcontratación y necesitamos poner fin a esto, dijo la funcionaria al participar en el foro, en representación del titular del IMSS, Zoé Robledo.

Informó que, en operativos conjuntos con el Servicio de Administración Tributaria, el IMSS, el Infonavit, la Unidad de Inteligencia Financiera y la Secretaría del Trabajo a empresas con indicios de evasión, se confirmó que había un registro menor del sueldo al que realmente se pagaba a los trabajadores, y se logró incrementar el salario base de cotización hasta 40 por ciento.

Además, explicó que en las empresas con ese tipo de prácticas el monto de evasión representa entre 0.2 y 3 por ciento de sus ingresos anuales, lo cual confirma que pagar correctamente sus cuotas de seguridad social no representa un impacto considerable a sus ingresos.

Bettina Schaller, presidenta de la Confederación Mundial del Empleo, criticó que existan empresas deshonestas que distorsionan la industria del empleo privado, lo cual no puede seguir, y manifestó el pleno soporte de esa organización para crear el nuevo marco regulatorio en México en materia de subcontratación.

La molestia del sector empresarial por la posible prohibición fue tal, que Raúl Maillard Barquera, presidente de la comisión laboral de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, reprochó: Las capacidades del gobierno, como las de ustedes, diputados, dan para hacer mejores propuestas.