Con objeto de hacer más eficiente el combate al huachicoleo, la Cámara de Diputados elaboró una iniciativa de reforma a las leyes de Hidrocarburos y Federal de Protección al Consumidor, para así identificar y castigar a las bandas delincuenciales que aún amenazan las estaciones de gasolina para que expendan los combustibles que continúan extrayendo de la red de ductos del país.

La propuesta elaborada por Geraldina Herrera, integrante de la bancada de Movimiento Ciudadano (MC), aduce que las tomas clandestinas aumentaron en más de 6 mil por ciento de 2000 a 2018, y en este último año se robaban en promedio 56 mil barriles diarios de combustible, sin ninguna intervención del gobierno federal, mas que el levantamiento del censo de las tomas clandestinas.

Entonces, destaca, el huachicol representó un jugoso negocio de 66 mil millones de pesos, y es de todos sabido que muchas estaciones de venta al público de petrolíferos han sido amedrentadas para que vendan esos productos a la ciudadanía, desconociendo la calidad de la gasolina y el diésel.

En busca de que esta situación no se repita en ninguna estación ubicada en la República Mexicana, y con la única intención de que la comercialización de petrolíferos cumpla estrictamente con la calidad que debe tener y no paguemos por hidrocarburos diluidos o de octanaje distinto al que se oferta, someto a consideración de todas las fuerzas políticas la siguiente iniciativa, con el propósito de que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) se convierta en brazo estratégico de los trabajos de verificación y cumplimiento de las especificaciones de calidad.

Y es que en el transcurso del sexenio anterior, de la revisión de los informes de labores de la Secretaría de Energía y de la Comisión Reguladora de Energía, destaca que no se sancionó a nadie por el incumplimiento de la norma oficial mexicana NOM 016-CRE-2016 sobre especificaciones de calidad de los petrolíferos.