Toluca, Méx., El pleno del Congreso del estado de México aprobó ayer por mayoría reformas y adiciones al Código Penal local para prohibir las denominadas terapias de conversión a las que son sometidos niños y adolescentes con la finalidad de modificar su orientación sexual, lo que viola su derecho a la identidad.

La propuesta presentada por la diputada Beatriz García, de Morena, obtuvo el respaldo de las bancadas de los partidos Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática, del Trabajo, Verde Ecologista de México, Encuentro Social y de los diputados independientes.

La reforma adiciona al Código Penal el artículo 211 sexies y el 7, éste denominado Delitos contra el libre desarrollo de la personalidad y la identidad sexual , el cual señala: A quien someta, coaccione u obligue a otro a recibir o realizar procedimientos o métodos con la finalidad de cambiar su orientación sexual, y derivado de éstos se afecte su integridad física o sicológica, se le impondrán de uno a tres años de prisión o de 25 a 100 días de trabajo en favor de la comunidad y de 50 a 250 unidades de multa.

Si la agresión se comete contra menores de edad, discapacitados, adultos mayores, personas privadas de libertad o que no tengan capacidad para comprender el significado del hecho, la pena se aumentará en una mitad.

La legisladora señaló que las terapias de conversión son prácticas consistentes en sesiones sicológicas, psiquiátricas o tratamientos en las que se emplea violencia física, moral, sicoemocional o sexual, mediante tratos crueles, inhumanos o degradantes que atenten contra la autodeterminación sexual de las personas.

Sostuvo que estas prácticas, en la mayoría de los casos, provienen de organizaciones cuya ideología condena la homosexualidad y está colmada de prejuicios sociales. Quienes ofrecen estos supuestos tratamientos no son clínicas especializadas, sino que se trata de cursos o talleres que se llevan a cabo en la informalidad.