No sirven ni para el mercado negro
Jueves 15 de octubre de 2020, p. 12
El robo de medicamentos oncológicos reportado la semana pasada genera dudas razonables
por varias causas, como que son productos que no podrán venderse ni en el mercado negro. Además de que es un asunto mediático, se trata de insumos que requieren condiciones especiales de resguardo y almacenaje para asegurar su calidad y eficacia.
Si eso no se cumple, los fármacos ya no sirven. Además, por su valor, estimado en alrededor de 10 millones de pesos, se piensa que quienes supuestamente los sustrajeron no saben nada del negocio
, señalaron fuentes del sector farmacéutico.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) está entre los compradores de esas medicinas provenientes de Argentina, y ayer el director de administración, Humberto Pedrero, aseguró que su adquisición fue posible porque cumplen los requisitos legales, empezando porque cuentan con registro sanitario.
Sin embargo, en la plataforma electrónica de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) no aparece ni el laboratorio como propietario de alguno de esos documentos que les autoriza a comercializar sus productos en el país.
Especialistas en el tema precisaron que aunque la Cofepris hubiera validado el registro emitido por la autoridad sanitaria de Argentina, con el argumento de que se trata de una situación de emergencia y así permitir su ingreso a México, los datos deben ser públicos.
En conferencia de prensa, donde se informó de la próxima licitación del IMSS para la compra de equipos de protección personal, Pedrero explicó que luego de la sustracción de los medicamentos han estado en comunicación con el fabricante, a fin de que lo más pronto posible los reponga y no haya desabasto en el instituto.
Interrogado sobre la razón de que hasta finales de septiembre los fármacos no hubieran sido entregados por la distribuidora Novag, que los tenía desde mayo pasado.El funcionario responsabilizó a la Cofepris por la revisión que realiza para certificar la calidad. Es un proceso que tarda de 10 a 21 días, dijo.
Otro asunto que contribuye a las dudas
sobre la veracidad del robo es lo ocurrido con el fabricante Laboratorio Kemex de Argentina. El pasado 11 de marzo, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) de ese país ordenó el retiro de dos lotes del medicamento oncológico Ciclofosfamida, debido a que se detectó un cambio de coloración del polvo liofilizado, que al reconstituirlo
para su aplicación se vueve turbio
.
Con ese antecedente, sumado a la tardanza en la liberación de los fármacos del almacén de Novag en México, es factible pensar que estos también tenían problemas de calidad. Ciclofosfamida está en la lista de los 10 oncológicos sustraídos, señalaron los especialistas consultados por este diario.